El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia ha calificado de "falsa" la noticia difundida en los medios estadounidenses sobre que Donald Trump habría compartido información secreta con el canciller ruso, Serguéi Lavrov.
"Recuerdo que les advertí el 11 mayo sobre que, al parecer, los medios de comunicación de Estados Unidos tenían la intención de emitir en un par de días una "noticia bomba" sobre la reunión entre Trump y Lavrov. Sin embargo, la idea consistía también en decorarla con unas fotografías no menos 'secretas' de la reunión, lo que debería haber proporcionado solidez y fiabilidad a esta otra noticia falsa", escribió en su cuenta de Facebook la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova.
"Pero nosotros hemos destruido esa parte de la campaña informativa al publicar las fotografías tal como lo suponen las leyes de la ética profesional", afirmó.
Por su parte, Dmitri Peskov, secretario de prensa del presidente ruso, ha afirmado que las informaciones sobre la supuesta entrega de datos secretos son una "tontería completa".
La Casa Blanca niega que Trump compartiera con Rusia secretos de Inteligencia
Una información publicada este lunes por 'The Washington Post' afirmaba que el presidente estadounidense, Donald Trump, compartió en su reciente reunión con Serguéi Lavrov una información considerada de alto secreto sobre el Estado Islámico.
Según 'The Washington Post', varios altos cargos, "actuales y antiguos", afirman que en la reunión con representantes de Rusia celebrada en el Despacho Oval este 11 de mayo, el mandatario estadounidense entregó información de Inteligencia tan "sensible" que ni siquiera fue compartida con los aliados de EE.UU. De esta forma, Trump habría puesto en riesgo las fuentes de Inteligencia de EE.UU., afirma el diario.
La noticia se difundió rápidamente por medios de comunicación estadounidenses e internacionales, aunque fue desmentida por la Casa Blanca. El portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, declaró que el secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson, así como varias personas presentes en aquella reunión, han desmentido esta acusación. Paralelamente, el periodista Mark Simone afirma que 'The Washington Post' no tuvo ningunas fuentes en aquella reunión.