Corea del Norte ha sido acusada en los últimos años de realizar diversos ataques cibernéticos, mayormente contra redes financieras en EE.UU., Corea de Sur u otros países. Kim Heung-kwang, exprofesor de ciencias de la computación en Corea del Norte y que desertó a Corea del Sur, contó a la agencia Reuters que esos ataques cibernéticos de Pionyang probablemente están organizados por la Unidad 180, perteneciente a la Oficina General de Reconocimiento norcoreana.
"La Unidad 180 se dedica a 'hackear' instituciones financieras, vulnerándolas y retirando dinero de sus cuentas bancarias", afirmó el especialista a Reuters. Asimismo, agregó que los piratas informáticos "viajan al extranjero para encontrar algún lugar con mejores servicios de Internet que Corea del Norte para no dejar huella".
Por su parte, el experto James Lewis, también citado por la agencia, indicó que Corea del Norte utilizó por primera vez la piratería informática "como herramienta de espionaje, y luego para el acoso político contra blancos de Corea del Sur y EE.UU."
A su vez, funcionarios surcoreanos alegan tener pruebas considerables de las operaciones de guerra cibernética realizadas por Corea del Norte, y afirman que lo están haciendo "a través de terceros países para ocultar el origen". Por ejemplo, se sospecha que Pionyang organizó ataques contra el operador de un reactor nuclear surcoreano en 2014. El investigador de seguridad Simon Choi señala que los mismos se llevaron a cabo desde una base en China.
Otra supuesta base de sus ciberataques, indica Reuters, es Malasia. De acuerdo con una investigación de la agencia, dos compañías IT en ese país poseen vínculos con la agencia de espionaje norcoreana, aunque no hay sugerencias de que las mismas estuvieran involucradas en la piratería informática.
Por su parte, el experto de EE.UU. Michael Madden señala que la Unidad 180 es uno de los muchos grupos de élite de guerra cibernética dentro de la comunidad de Inteligencia de Corea del Norte. Según él, su personal es reclutado en las escuelas secundarias superiores y recibe formación avanzada en algunas instituciones de formación de élite. "Tienen cierta autonomía en sus misiones y la realización de tareas", precisó.