Militantes islamistas han matado a 19 personas en la ciudad de Marawi, entre ellas tres mujeres y un niño, que fueron encontradas muertas cerca de una universidad. "Son civiles, mujeres. Estos terroristas son antihumanos. Encontramos sus cuerpos mientras realizábamos operaciones de rescate el sábado", dijo a la agencia AFP el portavoz militar regional, el teniente coronel Jo-ar Herrera.
La cadena filipina ABS-CBN News también informa que ocho civiles han sido encontrados muertos en una zanja en el límite entre las ciudades de Marawi e Ildan. Las autoridades descubrieron los cuerpos después de seguir rastros de sangre en una carretera que conduce a la localidad. Las víctimas tenían las manos atadas y presentaban heridas de bala en la cabeza.
Cerca de los cuerpos ha sido encontrada una pancarta de cartón con la palabra 'Munafik', que significa 'traidor' o 'mentiroso'. En el lugar también había varios proyectiles vacíos.
Durante los últimos días miles de personas huyeron de la ciudad filipina de Marawi, en la isla de Mindanao, para escapar de los enfrentamientos entre las tropas gubernamentales y el grupo terrorista Maute, vinculado a la organización yihadista Estado Islámico.
Ahora, en las calles de la localidad hay más soldados que residentes, lo que convierte a Marawi, hasta hace poco centro de comercio provincial y hogar de más de 200.000 personas, en una ciudad fantasma.
Este 23 de mayo, el presidente filipino, Rodrigo Duterte, decretó la ley marcial en toda la isla de Mindanao (en el sur del país) después de que un grupo de milicianos asaltara diversas áreas de la ciudad de Marawi y se enfrentaran al Ejército, desplegado para recuperar el control de la zona.