Una estampida en el final de liga hondureña de fútbol deja cinco muertos (FOTO, VIDEO 18+)
Este domingo cinco personas han fallecido en Tegucigalpa como consecuencia de una estampida de aficionados en el Estadio Nacional, informan medios locales. El hecho tuvo lugar antes de la gran final del Torneo de Clausura del campeonato hondureño de fútbol de primera división.
Como causas del suceso se menciona la sobreventa de boletos y la mala organización del acceso al recinto deportivo. Según 'La Prensa', el caos fue provocado por los aficionados que intentaron entrar al estadio cuando ya estaba lleno y el partido entre Motagua y Honduras Progreso estaba a punto de empezar.
Según los informes, cientos de aficionados entraron a la fuerza por un portón de la gradería popular y, para tratar de controlarlos, la Policía lanzó bombas de gas y chorros de agua con una tanqueta.
El portavoz del hospital donde fueron ingresadas las víctimas del suceso comentó a AFP que "dos personas murieron en el estadio y dos en el hospital". Más tarde se ha reportado sobre otro fallecido. "Los lesionados sufrieron golpes o intoxicaciones por bombas de gases lacrimógenos que lanzó la policía", comentó, añadiendo, que, en total, hubo una veintena de heridos ingresados.
"Hemos evacuado dos muertos y 17 heridos [al producirse] una avalancha en la gradería", comentó a AFP el teniente Luis Barahona, uno de los policías responsables por el operativo. Según medios locales, el número de heridos asciende a 25.
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Según el comunicado de prensa de la Secretaría de Estado y la Policía Nacional de Honduras, tras el hecho las autoridades planean reforzar las medidas de seguridad que regulan el acceso de los espectadores a los eventos deportivos.
Además, la Fiscalía del país planea iniciar una pesquisa sobre la sobreventa de boletos "ya que el estadio ya había alcanzado su máxima capacidad de asistentes y en las afueras una multitud esperaba ingresar con sus respectivos boletos", reza el mensaje de las autoridades.
También en el comunicado se destacó que los responsables por la sobreventa de boletos son el club sede y la Liga Nacional de Fútbol, mientras que la única responsabilidad de los cuerpos de seguridad del Estado es "garantizar que la instalación deportiva no sobrepase su capacidad precisamente para evitar una tragedia".
