Desde el año 2012, el vehículo explorador Curiosity de la NASA ha trabajado en Marte reuniendo información para determinar si existió vida alguna vez en el planeta, determinar las características de su clima y analizar su geología. El estudio con las conclusiones ha sido publicado en la revista 'Science'.
Tras estudiar los datos recopilados por el Curiosity desde el cráter Gale a lo largo de los últimos 3,5 años y las secuencias sedimentarias de lo que fue un antiguo lago, los científicos han llegado a la conclusión de que Marte cuenta con un entorno habitable desde hace entre 3.800 millones y 3.100 millones de años.
Asimismo, los investigadores sostienen que a lo largo de unos 700.000 años el planeta ha dispuesto de "todas las condiciones físicas, químicas y energéticas necesarias" para albergar vida.
Cerca de la superficie del cráter se ha observado la presencia de agentes oxidantes y rocas formadas de grandes y densos granos mientras en capas más profundas, formadas de sustancias más finas, han detectado reductores. Este tipo de estratificación demuestra que Marte experimentó un cambio climático, reza el estudio.
Uno de los autores del trabajo, Joel Hurowitz, sostiene que el clima de Marte era en un primer momento más parecido al de nuestro planeta que en estos momentos, aunque señala que es difícil determinar las condiciones climáticas con exactitud.
"Si buscamos la misma química de las rocas terrestres, probablemente podríamos decir que algunas rocas quizás estaban en condiciones parecidas a las de una zona glaciar mientras otras se encontraba en un clima templado", comentó Hurowitz a la revista 'Newsweek'.