YouTube se niega a eliminar los videos que radicalizaron a uno de los terroristas de Londres

El gigante informático Google ha rechazado quitar de YouTube los discursos de predicadores yihadistas que 'inspiraron' al joven Khuram Butt a cometer el atentado terrorista del pasado 3 de junio en Londres.

El gigante informático Google no planea eliminar de su plataforma de videos las grabaciones que radicalizaron a Khuram Butt, el joven de 27 años de edad que se convirtió en uno de los tres autores del ataque terrorista de este sábado en Londres. De acuerdo con la compañía, la eliminación de YouTube de los discursos de odio de los predicadores Ahmad Musa Jibril y Abu Haleema sería una violación de las "reglas" de la corporación, según expone 'Daily Mail'.

Estos videos de carácter yihadista han influido mucho la personalidad de Khuram Butt, según uno de los amigos del terrorista: "[Butt] solía escuchar mucho a Musa Jibril. He oído algunas de las cosas que dice y son muy radicales. Me sorprende que este material todavía esté en YouTube y sea tan fácilmente accesible", comentó.

En sus discursos, varios de los cuales tienen más de un millón de reproducciones, el predicador extremista llama a ver como enemigos a todos los 'kuffar' (no creyentes) e insta a no afligirse por las víctimas de los atentados terroristas.

Musa Jibril califica a los musulmanes moderados de "tumores malignos" de la comunidad islámica, y acusó al alcalde de Londres, Sadiq Khan -un musulmán creyente-, de ser un 'kuffar'.

En cuanto al segundo predicador, Abu Haleema, el terrorista apareció junto al terrorista en un documental sobre islamistas radicales en el Reino Unido de la cadena Channel 4 titulado 'The Jihadist Next Door' ('El yihadista de la casa de al lado'). En el documental, se puede observar al joven orando junto a otras personas en el Regent's Park de Londres frente a una bandera negra asociada al Estado Islámico.

Ola de reacciones

El lunes por la noche, gran número de políticos y expertos antierroristas criticaron la postura de Google, tachándola de 'confabulación' con los predicadores del odio.

Por ejemplo, el profesor Anthony Glees, director del Centro de Estudios de Seguridad e Inteligencia de la Universidad de Buckingham, comentó que "no cabe duda de que este material debe ser eliminado".

"[Las empresas tecnológicas] tienen una evidente responsabilidad moral por el daño causado [por los videos]. Están participando en la instigación de los islamistas radicales", añadió.

El portavoz de YouTube trató de salir al paso de esta polémica y declaró que la empresa estaba dispuesta a colaborar con el Gobierno del Reino Unido para detener la propagación de grabaciones con mensajes de odio. Sin embargo, sus palabras podrían caer en saco roto, dado que una gran cantidad de videos de Jibril y Haleema siguen circulando sin problema por la plataforma.