El FC Barcelona ha defendido la legalidad del contrato de patrocinio firmado con Qatar Sports Investment (QSI) entre diciembre del 2010 y junio del 2016, después de informes de la prensa española que denunciaban presuntas irregularidades económicas y desvío de fondos en el acuerdo.
En un comunicado, la entidad azulgrana indica que ingresó un total de 171 millones de euros (unos 191 millones de dólares) por concepto del convenio firmado con la compañía catarí. "Obviamente el club tiene los correspondientes justificantes de ingresos" y el contrato "no comportó ningún coste en concepto de intermediación", como denuncian algunos medios de comunicación, señala.
En virtud del contrato con QSI se acordó colocar el nombre de Qatar Foundation en la parte delantera de la camiseta, pero también incluía una cláusula que permitía un cambio después de dos años y fue reemplazado por Qatar Airways.
La investigación
Al respecto, la Guardia Civil española abrió a inicios de esta semana una investigación del patrocinio de QSI y determinar si el expresidente del club catalán, Sandro Rosell, recibió comisiones por dar el visto bueno al contrato.
Sin embargo, el FC Barcelona ha aclarado en el comunicado que el acuerdo fue "debidamente auditado las últimas seis temporadas" por una compañía externa al club, "que ha revisado toda la información sobre la actividad económica de la entidad y ha comprobado que fuera la imagen fiel de su gestión, sin excepción".
Además, ha entregado una copia de ese contrato y de los justificantes de ingresos a la Policía Judicial de la Guardia Civil "como muestra de máxima transparencia y colaboración". Por último advierte que se reserva el derecho a emprender acciones legales ante "difamaciones o acusaciones falsas sobre la honorabilidad de la gestión del club".