El feminicidio de Valeria, una niña de apenas once años cuyo cuerpo fue encontrado en una camioneta de transporte público en el municipio de Nezahualcóyotl, en la periferia de Ciudad de México, ha generado una ola de protestas y manifestaciones que llegan ya a su cuarto día consecutivo.
Durante una marcha que cruzó la avenida Sor Juana Inés de la Cruz y llegó a la alcaldía de esta población de 1.109.363 habitantes, considerado la primera ciudad dormitorio del centro del país, familiares y conocidos de la menor asesinada gritaban "¡Justicia!" por la muerte de la niña Valeria Teresa Gutiérrez.
Valeria fue raptada el pasado jueves 8 por el chófer de una combi de pasajeros en una importante avenida del municipio. Su padre la estaba llevando en bicicleta cuando comenzó a llover, por lo que decidió parar el vehículo y subir a su hija para que no se mojara. En ese momento, el conductor se dio a la fuga ante la desesperación del padre, que no pudo alcanzarlo pedaleando.
El cuerpo sin vida de la niña fue encontrado dentro de la combi por la propia familia un día después, a apenas seis calles de distancia de la alcaldía.
Las manifestaciones, integradas por familiares, compañeros de escuela de Valeria y vecinos, comenzaron al siguiente día de que el cuerpo fuera hallado.
Con pancartas y aerosoles, los inconformes pintaron este domingo el suelo y partes de la fachada de la alcaldía con mensajes como "Ni un feminicidio más. ¡Ya basta!" y colocaron veladoras que fueron removidas al día siguiente.
El semanario 'Proceso' dio a conocer que el presunto culpable, identificado como Jose Octavio N., fue detenido dos días después del rapto e ingresó en el penal que se encuentra en el municipio. Sin embargo, los familiares de Valeria exigen contrastar el rostro del detenido con las cámaras de seguridad, pues temen que el detenido sea un chivo expiatorio. Además, también exigen la regularización de las rutas de transporte público, las cuales no cuentan con los perfiles de quienes contratan como chóferes.
'Neza' y el Estado de México
La ciudad que lleva el nombre del famoso gobernante prehispánico Nezahualcóyotl, que en náhuatl significa coyote en ayuno, se ubica en el estado de México, el lugar que sufre más violencia feminicida de todo en el país.
Colindantes con la capital mexicana, municipios como Ecatepec, Naucalpan y 'Neza', como se le conoce coloquialmente a Nezahualcóyotl, compiten por el primer lugar en el conteo de mujeres asesinadas en 2017, el cual asciende a 109 en todo el estado.
Caravanas, actos políticos, siembra de cruces rosas en los lugares más peligrosos, manifestaciones y la exigencia del cumplimiento efectivo de la Alerta de Género, un mecanismo que debería sensibilizar y hacer operar a las autoridades en caso de feminicidio, pero no ha dado resultado hasta la fecha.
El carácter periférico de sus ciudades, los niveles de pobreza que sufre, la violencia y la urbanización salvaje causan graves problemas estructurales en el estado de México. Una semana después de que la entidad celebrara sus elecciones a gobernador, tachadas por algunos sectores de la población como un fraude, los habitantes denuncian los problemas profundos que ahí se viven.
Frente a la alcaldía de Neza, los familiares de Valeria denunciaron la pasividad de las autoridades: "Ustedes saben cuál es el protocolo. Tenían que haber ido por ella". De acuerdo con la familia, la Policía municipal no reaccionó a tiempo y pidió 48 horas para operar ante la desaparición de Valeria.
Este martes continuarán las protestas contra este y otros feminicidios en Nezahualcóyotl mediante una asamblea que convoca a vecinos a organizarse ante la ola de violencia que sufren las mujeres.
En #Neza#NosQueremosVivas por eso hemos decidido organizarnos como vecin@s. Basta de #Feminicidios en #Neza#NiUnaMás#NiUnaMenospic.twitter.com/THHZjP1BGK— NezaCombativa (@NezaCombativa) June 12, 2017