El Estado Islámico busca someter a los talibanes y a otros grupos armados locales para establecerse en Afganistán y ampliar su influencia en Asia Central, según ha señalado el director del Centro Antiterrorista de la Comunidad de Estados Independientes, Andréi Nóvikov, en su intervención en la sede de la ONU en Nueva York.
El grupo armado "exporta un nuevo modelo de actividad terrorista y extremista desde las zonas de combate [en Siria e Irak] hacia los países de Asia Central", ha alertado Nóvikov, cuyas afirmaciones recoge TASS. En particular, ha enfatizado que la actividad creciente de los talibanes en las regiones del norte de Afganistán podría indicar que algunos comandantes del grupo están cambiando lealtades y uniéndose al Estado Islámico.
El director del Centro Antiterrorista ha recordado que los talibanes nunca reclamaron territorios fuera de Afganistán, mientras que en 2015 el Estado Islámico anunció la creación en ese país de una 'provincia' que se extendía también a territorios de países de Asia Central.
Rivalidad entre dos grupos armados
"El análisis de los enfrentamientos militares en Afganistán muestra que los militantes [locales] no solo adoptan la estrategia del Estado Islámico, sino también conceptos militares de la organización", ha aseverado. Nóvikov ha precisado que ahora los extremistas buscan apoderarse de grandes ciudades y luego tomar bajo su control el territorio circundante, preparando los cimientos para una mayor expansión.
Sin embargo, el Estado Islámico está en confrontación con varias fuerzas de los talibanes por el control de territorios afganos. "A medio plazo, el Estado Islámico se ha establecido el objetivo de ampliar su influencia en las regiones del norte de Afganistán y conseguir acceso a las áreas fronterizas de los países de Asia Central, así como de la región autónoma china de Sinkiang", ha concluido Nóvikov.