El Mando Europeo de EE.UU. concentra una importante fuerza en el mar Negro para participar desde el 10 al 22 de julio en una serie de ejercicios conjuntos con otros países tanto miembros como socios de la OTAN. Las maniobras, denominadas Sea Breeze 2017, transcurrirán en el mar y en las regiones costeras de Ucrania.
Los objetivos declarados de estos ensayos son mejorar la flexibilidad y la operabilidad recíprocas de las tropas y las flotas participantes y fortalecer la "capacidad de respuesta combinada". En opinión de los organizadores, las maniobras buscan proporcionar una estabilidad a la región del mar Negro, reza la página web de la 6.ª Flota de EE.UU.
La agenda incluye, entre otras misiones, entrenamientos para un bloqueo marítimo, en defensa aérea y guerra antisubmarina; tácticas de control de daños, búsqueda y rescate y el desembarco en combate.
El crucero de misiles estadounidense Hue City y el destructor de misiles Carney llevarán a bordo a un total de 800 tripulantes y efectivos de la Infantería de Marina. De la parte estadounidense, participará en los ejercicios también un avión Boeing P-8 Poseidon, que protagonizará un simulacro antisubmarino.
El resto de material bélico participante será prestado por los Ejércitos y las fuerzas navales de Bélgica, Bulgaria, Canadá, Francia, Georgia, Grecia, Italia, Lituania, Moldavia, Noruega, Polonia, Portugal, el Reino Unido, Suecia, Turquía y Ucrania, que es el país anfitrión.
Los ejercicios multilaterales se convocan anualmente desde 1997. Geográficamente, el año pasado abarcaron el noroeste del mar Negro, el sur de la provincia ucraniana de Odesa y parte de la provincia de Mikolayiv.