El descubrimiento de un mapa del siglo XIX podría acalorar una disputa territorial entre Corea del Sur y Japón y dañar aún más las tensas relaciones bilaterales entre ambas naciones. El mapa claramente marca las Rocas de Liancourt —denominadas por Seúl como Dokdo— como parte de Corea (que entonces era un reino unificado).
Según la agencia surcoreana Yonhap, el mapa cubre la península coreana y muestra a Dokdo cerca de la isla de Ulleungdo, al este de la costa coreana. El descubrimiento contradice las reiteradas afirmaciones de soberanía por parte de Japón, donde el archipiélago se conoce con el nombre de Takeshima.
Irónicamente, el mapa fue hallado en Japón en posesión de un ciudadano de ese país, pero una inscripción en él apunta a que había pertenecido a una biblioteca en Pionyang desde 1932. La carta gráfica fue dibujada por el cartógrafo y geólogo coreano Kim Jeong-ho entre 1864 y 1889, y es una versión hecha a mano de Daedongyeojido, un mapa que el mismo cartógrafo realizó en 1861 pero que no incluía a la isla.
Does Old Map Japanese Map Show Dokdo as Korean Territory? https://t.co/cBSnVUqvYOpic.twitter.com/cupPN9OfaV— GIKorea (@GIKorea) 5 августа 2017 г.
Tierras en disputa
El descubrimiento ha sido tomado desde Corea del Sur como otra prueba de que el archipiélago no habitable de Dokdo —que cuenta con un destacamento permanentemente de Policía surcoreano— es territorio soberano coreano.
Seúl argumenta que estos islotes solo entraron bajo el control de Tokio cuando el Japón imperial invadió la península coreana en 1910. Las islas fueron entonces cedidas a la prefectura de Shimane, la parte más cercana del territorio principal de Japón, hasta que ese país fue derrotado en la Segunda Guerra Mundial y se rindió en agosto de 1945.
No obstante, la redacción engorrosa del Tratado de Paz de San Francisco en 1951 dejó sin mencionar a Dokdo entre los territorios que debían ser devueltos a Corea, lo que, de acuerdo con Seúl, habría evitado la actual disputa.