"Los mapuches no reconocen al Estado argentino y no lo vamos a permitir"

La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, justifica la labor de la Gendarmería durante un desalojo en el que desapareció el joven Santiago Maldonado.

La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, aseguró en una entrevista con Radio Mitre que las agrupaciones mapuches que se manifestaron en los últimos días en el sur de ese país tienen una "lógica anarquista".

Mientras que el joven Santiago Maldonado se encuentra desaparecido desde este 1 de agosto y algunos organismos de derechos humanos sospechan que las autoridades podrían estar implicadas, esa alta funcionaria trató de rebatir esas acusaciones.

Así, Bullrich recordó que el comunicado que publicó el juez Guido Otranto indicaba que "no hay ninguna comprobación de que Gendarmería haya tenido alguna participación" y agregó que "no nos consta de ninguna manera que Gendarmería haya retenido a Santiago Maldonado".

Sin embargo, asociaciones como Madres de Plaza de Mayo y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) manifestaron este martes su desconfianza con las fuerzas de seguridad y convocaron a una manifestación para el viernes 11 de agosto a las 17 en Plaza de Mayo, Buenos Aires, donde exigirán la aparición con vida de Santiago

Este lunes, la ONU exigió al Gobierno de Mauricio Macri que tome medidas urgentes para encontrar a Santiago Maldonado. Tras las críticas que las autoridades recibieron por no pronunciarse al respecto, el Ejecutivo anunció en el Boletín Oficial argentino que otorgará 500.000 pesos —alrededor de 28.250 dólares— a quien aporte datos sobre su paradero

En ese documento oficial aparecen más detalles, como que "habría sido visto por última vez" en el departamento de Cushamen (provincia de Chubut). En efecto, Maldonado estaba en la comunidad indígena Pu Lof en Resistencia, donde también se realizan reivindicaciones históricas para los pueblos originarios.

Enfrentamientos

La desaparición se da en un contexto de extrema tensión entre la comunidad mapuche y el Estado argentino. Por ejemplo, el 31 de julio se desarrollaron disturbios en un juzgado de Bariloche (Río Negro) y se produjeron al menos nueve detenciones, debido a que activistas aborígenes se enfrentaron con la Policía mientras exigían la liberación del líder Facundo Jones Huala, preso desde el 27 de junio tras un pedido de extradición desde Chile. 

Sin entrar en las actuaciones de las fuerzas de seguridad, Patricia Bullrich declaró que "queremos que la Patagonia sea un lugar donde la gente viva tranquila" y manifestó que "esta exacerbación de la violencia" se debe a que el Estado se ha planteado "estar presente para que la ciudadanía no esté miedosa o subsumida por grupos minoritarios que incluso son cuestionados por la comunidad mapuche".

Con sus palabras, la ministra de Seguridad de Argentina trató de diferenciar a las agrupaciones "radicalizadas" del resto de los aborígenes y subrayó que "no permitiremos que se use la violencia como forma de acción o que se plantee la duda del territorio argentino como independiente y autónomo" y "no permitiremos que se quiera imponer una república autónoma y mapuche en medio de la Argentina".