Washington, y no Pionyang, es el culpable de estar llevando al mundo al borde de una guerra nuclear, sostiene en declaraciones a RT Bruce Gagnon, coordinador de la Red Global Contra las Armas y el Poder Nuclear en el Espacio, quien explica que los constantes ejercicios militares que se realizan a las puertas de Corea del Norte la están obligando a armarse.
Al señalar la abrumadora ventaja militar estadounidense sobre Corea del Norte, Gagnon subraya que es improbable que Pionyang busque tener un enfrentamiento bélico directo contra un poder tan superior a ella.
Pionyang tiene cuatro ojivas nucleares, EE.UU. tiene 6.800
Como ejemplo de esto, el experto explica que Pionyang "tiene cuatro ojivas nucleares, mientras que EE.UU. tiene 6.800", que Washington "prueba de forma rutinaria" disparando al Pacífico misiles nucleares desde la Base Aérea Vandenberg en California.
Además, Gagnon recuerda que la guerra entre Corea del Norte y EE.UU. "está legalmente en curso", ya que ningún tratado formal de paz ha sido firmado entre ambos países desde el fin de las hostilidades de la guerra que los enfrentó en los años cincuenta.
En estas circunstancias, la intención de Pionyang de mejorar su capacidad militar, incluida la construcción de fuerzas de disuasión nuclear, es bastante comprensible y representa "una medida defensiva", afirma Gagnon.
"Mientras EE.UU. se niegue a firmar un tratado de paz y a poner fin a sus juegos de guerra en la frontera norcoreana, ¿qué debe hacer Corea del Norte, si no tratar continuamente de reforzar su Ejército por temor a un ataque de EE.UU.?", plantea.
Además, el experto recuerda que los temores de Pionyang no son infundados, teniendo en cuenta la larga historia de intervenciones militares de EE.UU., cuyas últimas víctimas han sido Yugoslavia, Afganistán, Irak, Libia y Siria.
Riesgo de una desastrosa guerra global
Al describir las perspectivas de una guerra total entre los dos países como "muy aterradora", Gagnon apunta que el pueblo estadounidense debe llamar a sus líderes a recuperar la cordura y detener la tensión "antes de que sea demasiado tarde".
"Estamos hablando aquí de la posibilidad de una guerra nuclear", en la que "millones de coreanos y japoneses", así como "decenas de miles de soldados estadounidenses en esos dos países" morirían, mientras que, dada la proximidad de Corea del Norte a Rusia y China, existe también un riesgo real de que el conflicto se convierta en una desastrosa guerra global, alerta el analista.