En el último año, cuatro sucesos han manchado de sangre al municipio mexicano de Culiacán, y han desatado 1.043 asesinatos violentos en un año tan solo en el estado de Sinaloa, según revelaron medios locales de acuerdo con datos de la Fiscalía mexicana.
Se trata del rapto de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, alias 'El Chapo', ocurrido el pasado 15 de agosto de 2016, cuando se encontraban en el restaurante La Leche, ubicado en Puerto Vallarta, Jalisco.
El segundo evento fue la extradición de México a EE.UU. de Guzmán Loera, el otrora líder del cartel de Sinaloa, registrada el 19 de enero de este año.
El tercer evento ocurrió el pasado 2 de mayo, cuando se efectuó la captura de Dámaso López Núñez, alias 'El Licenciado', capo que –según informes de la Fiscalía mexicana– les disputaba la plaza de Sinaloa, con la ayuda del cartel de Jalisco Nueva Generación, a los hijos de 'El Chapo'.
Y el cuarto y último, fue la entrega voluntaria de Dámaso López Serrano, alias 'El Mini Licenciado', ante la Agencia Antidrogas de EE.UU. (DEA, por sus siglas en inglés), quien fue acusado de asociación ilícita y tráfico de drogas. Se presume que el joven capo se acogió –desde el pasado 27 de julio– al programa de protección de testigos de EE.UU.
Algunos especialistas, como el secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Genaro Robles Casillas, aseguraron a 'El Universal' que, de acuerdo con los registros públicos de la entidad, cuando 'El Mini Licenciado' se entregó a la DEA, se redujeron los índices de inseguridad del estado, al documentarse 35 homicidios violentos menos en julio, que los 181 registrados en junio del 2017.