Los datos publicados este miércoles por Eurostat apuntan a una recuperación económica generalizada, en la medida en que los países de la zona euro han situado en el segundo trimestre del año su crecimiento por encima del 2% anual. En términos trimestrales, el Producto Interior Bruto del euro creció en un 0,6% -una décima más que en el trimestre anterior- con buenas cifras en las economías de países como España (+0,9%), Alemania (+0,6%) o Francia (+0,5%) cuyas tasas de avance parecen ir ganando solidez.
Incluso Italia, que tiene una importante deuda y diversos problemas que lastran su economía desde hace unos quince años, ha sido capaz de alcanzar una tasa de crecimiento interanual del 1,5%, siendo este su mejor dato desde 2011.
Por su parte, el Reino Unido, inmerso en las complejas negociaciones del Brexit, ha mostrado un crecimiento muy modesto, de apenas la mitad del alcanzado por los países del euro.
Euro area GDP +0.6% in Q2 2017 (EU 0.6%),+2.2% compared with Q2 2016: flash estimate from #Eurostathttps://t.co/cAGJm6EBSTpic.twitter.com/uxAEMb9nJN— EU_Eurostat (@EU_Eurostat) 16 de agosto de 2017
Varios países de Europa Occidental como República Checa, Rumanía, Letonia o Polonia han logrado tasas de crecimiento superiores al 4% anual, lo cual ha supuesto uno de los impulsos más importantes para la actual economía comunitaria.
Además, la importante reducción del desempleo (que ha situado las cifras en cotas parecidas a las de 2009), el crecimiento sostenido que se ha mantenido durante nada menos que 17 trimestres consecutivos y las derrotas políticas de los populismos en Holanda y Francia —que pretendían nutrirse electoralmente del descontento social con respecto al panorama económico— son las razones de un optimismo que anima a Bruselas a dar por terminada, teóricamente, la recesión que comenzó con la caída de Lehman Brothers hace 8 años.