Científicos de importantes observatorios espaciales creen haber detectado un tipo completamente nuevo de perturbaciones en el espacio-tiempo que podrían arrojar luz sobre el origen del universo, informa la revista 'New Scientist'.
El fenómeno de las ondas gravitatorias fue predicho por Albert Einstein en su teoría de la relatividad. Estas ondas se generan al liberarse grandes cantidades de energía, tras la colisión entre objetos de enorme densidad, como los agujeros negros, ofreciendo información relevante sobre el origen de las estrellas.
Hasta ahora las ondas gravitatorias han sido observadas directamente en tres ocasiones, la primera el 14 de septiembre de 2015. En todos los casos fueron producto de colisiones entre agujeros negros.
Sin embargo, los científicos del observatorio espacial norteamericano LIGO y del europeo VIRGO creen haber presenciado una nueva fuente de perturbaciones gravitatorias, causada por la colisión de dos estrellas de neutrones, resultantes del colapso de estrellas supergigantes.
Para corroborar la fuente de las ondas, los científicos apuntan sus telescopios, incluyendo el Hubble, hacia la galaxia NGC 4993 y coordinan la recolección de datos. Los astrónomos creen que la señal tiene su origen en una estrella de neutrones binaria perteneciente a esa galaxia, ubicada a unos 130 millones de años luz de la Tierra.
Mientras varios astrónomos ya han tuiteado mensajes que especulan sobre la inminente detección de ondas gravitatorias, el portavoz del observatorio LIGO se ha limitado a confirmar que "una importante observación está a punto de concluir" el 25 de agosto, agregando que espera publicar nueva información de gran relevancia para esa fecha.