La fundación de un nuevo partido en Colombia llega de cara a las elecciones presidenciales del 2018. Durante una conferencia, los dirigentes del antiguo grupo guerrillero han declarado que buscan convertirse en un ejemplo de la democracia que necesita el país.
Los orígenes de las FARC, originalmente Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, se remontan a 1964. Con los años la fuerza principal de la guerrilla colombiana se hizo muy numerosa y para el 2016 contaba con 17.500 integrantes en sus filas. De ellos, más de 7.000 eran hombres armados, mientras que el resto se catalogaban como adeptos del grupo armado.
El desarme del grupo guerrillero fue parte esencial del acuerdo firmado entre su actual líder, Rodrigo Londoño Echeverri, alias 'Timochenko', y el presidente Juan Manuel Santos para poner fin al conflicto interno. A medida que las partes estaban cumpliéndolo, unas 8.000 armas fueron entregadas.
El primer congreso sin armas del ahora partido ha contado con 1.200 delegados que se reunieron en Bogotá. Allí se han perfilado los lemas claves que utilizarán en las próximas campañas electorales: la lucha contra la corrupción y cumplimiento de los acuerdos de paz para beneficiar a "la gente del común indignada".
Aunque las siglas continuarán siendo las mismas, ahora pasan a significar "Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común". Así lo ha votado la mayoría de delegados.
Se ha filtrado que podrían ser Iván Márquez y Pablo Catatumbo quienes encabecen las listas del partido.
Para las próximas dos legislaturas en Colombia, es decir, desde el 2018 hasta el 2026, la FARC tendrá garantizada una representación de 10 escaños en el Congreso, cinco en el Senado y cinco en la Cámara de Representantes.
El expresidente y exsecretario general de Unasur, Ernesto Samper, ha dicho que la FARC con su nueva posición como partido político refrescará el panorama político en el país, marcado por la decadencia de muchos partidos tradicionales. Y por el momento el grupo tiene hasta el 12% de aprobación popular.