Este 14 de septiembre se han iniciado las maniobras estratégicas conjuntas de las Fuerzas de Rusia y Bielorrusia Zapad 2017 [Occidente 2017], según ha informado el Ministerio de Defensa ruso.
Los simulacros se desarrollarán en seis polígonos y una localidad de Bielorrusia y en tres polígonos rusos. Incluirán episodios tácticos con fuego de combate y amplio uso de fuerzas y aviación, así como de tropas de defensa antiaérea.
En el marco de los ejercicios, los cuerpos de mando y formaciones militares de las dos naciones simularán acciones conjuntas en términos de cooperación y logística multilateral dentro de los grupos de las tropas regionales.
Los objetivos clave
Los objetivos principales de las maniobras son la mejora de la compatibilidad operativa de los mandos de varios niveles, la coordinación de los futuros sistemas de control de tropas y de armamento, así como la aprobación de nuevos documentos de ordenanza. Además, se pretende practicar la planificación de los eventos de carácter militar y el mando de las tropas con base en la experiencia de los conflictos militares modernos.
Según señala el Ministerio ruso en un comunicado, los ejercicios se llevan a cabo bajo el mando de los jefes de Estado Mayor de Rusia y Bielorrusia, y son "la etapa final de la preparación conjunta de las fuerzas de los dos países". Se destaca que las maniobras tienen "un carácter exclusivamente defensivo" y "no están dirigidas contra ningún Estado ni grupo de Estados".
En las maniobras participarán más de 12.000 militares, se usarán unos 70 aviones y helicópteros, 680 unidades de vehículos militares, entre ellos 250 tanques y 10 barcos de combate.
La preocupación de la Alianza
Pese a que las maniobras se ajustan a las normas internacionales, su escala preocupa a algunos altos funcionarios de la OTAN, así como a distintos medios occidentales.
Mientras las tropas rusas y bielorrusas realizaban los preparativos para Zapad 2017, el Pentágono se puso "en alerta". Por su parte, el representante permanente de Rusia ante la Alianza Atlántica, Alexánder Grushkó, recordó que "en los últimos meses hemos leído muchísimas 'historias de terror' acerca de las maniobras Zapad 2017, en las que había muchas invenciones sobre la posibilidad de que serían utilizadas para la concentración de fuerzas y la concreción de algunas intenciones agresivas contra determinados países de la OTAN".
Las maniobras suecas
Mientras, esta semana Suecia ha lanzado su mayor ejercicio militar en 23 años, con la participación de varios países de la OTAN. Los ejercicios han iniciado justo en vísperas de los Zapad 2017, que involucran menos tropas, pero curiosamente suscitan mucha más agitación entre los miembros de la Alianza Atlántica.
El ejercicio masivo involucra a 20.000 efectivos, el 90% de los cuales son suecos, pero alrededor de 2.000 soldados extranjeros también están participando en los ejercicios, de los cuales más de 1.400 son de EE.UU. El resto de países miembros de la OTAN que participan son: Dinamarca, Estonia, Francia, Lituania y Noruega, además de Finlandia, que no pertenece a la Alianza.