La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, ha promulgado este jueves la ley que despenaliza el aborto, con la que estima que "estamos saldando una deuda enorme con las mujeres" de su país.
Esa nueva norma, que cuenta ya con el apoyo mayoritario en el Congreso chileno, se podrá aplicar en tres casos concretos: violación, inviabilidad del feto o peligro para la vida de la gestante. Sin embargo, la mandataria ha recalcado que "no obliga a la mujer a decidir en un sentido u otro".
Al respecto, Bachelet ha detallado que "por fin firmamos la ley que consagra el derecho a que toda mujer decida sobre su cuerpo", ya que estima que las personas de sexo femenino "no pueden ser obligadas por el Estado a vivir una situación de enorme sufrimiento".
Para Michelle Bachelet, "no solo han ganado las mujeres, ha ganado la democracia" y "nos hemos ganado el derecho a debatir este y todos los temas sin mordazas" con lo cual, "a partir de hoy, Chile es un mejor país".
Las estadísticas oficiales indican que en Chile se produjeron 322.814 interrupciones de embarazo durante los últimos 10 años, la mayoría de forma ilegal.