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Ultimatum: El gobierno de España le da 48 horas a la Generalitat para intervenir sus cuentas
Hacienda asume el control de los gastos del gobierno catalán y le concede 48 horas para que renuncie cualquier dinero no destinado a servicios públicos.
España amenaza con cerrar el grifo ante la más mínima posibilidad de que el dinero público se emplee en la organización del referéndum soberanista catalán previsto para el próximo 1 de octubre. Tal como informa el diario 'El País', este viernes el Consejo de Ministros ha aprobado toda una serie de medidas para impedirlo.
El Ministerio de Hacienda asumirá el control de los gastos de la Generalitat y ha concedido un plazo de tan solo 48 horas para que el gobierno catalán renuncie a las partidas presupuestarias que no estén directamente destinadas a servicios públicos o al pago de las nóminas de los funcionarios. Dentro de ese plazo, Carles Puigdemont debe aprobar un acuerdo de no disponibilidad presupuestaria, sobre todo el presupuesto catalán, que no esté vinculado a servicios públicos fundamentales, como nóminas, sanidad, educación y servicios sociales.
Por otra parte, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; el vicepresidente, Oriol Junqueras; la presidenta del Parlament, Carme Forcadell; y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; han enviado una carta conjunta al Rey Felipe VI y a Mariano Rajoy para solicitar un diálogo sobre el referéndum. En ella, hacen "un llamamiento al diálogo para abordar de qué manera nos podemos poner de acuerdo para que los catalanes celebremos el referéndum. Un diálogo abierto y sin condiciones".
Mientras tanto, desde el gobierno de España insisten, a través de su portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, en que "ni un euro de los catalanes irá a un referéndum ilegal".
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