El Consejo de Seguridad de la ONU ha condenado el nuevo lanzamiento de un misil por parte de Corea del Norte, calificándolo como "altamente provocador". Este viernes, el Consejo de Seguridad ha llevado a cabo consultas de emergencia, convocadas a petición de EE.UU., Japón y Corea del Sur.
El organismo manifestó que es necesario que el país asiático muestre su compromiso con la desnuclearización. Además, se exige la plena aplicación de las nuevas sanciones contra Pionyang y la desescalada de la tensión.
Rusia cumplirá con las sanciones contra Corea del Norte, pero también espera que para resolver la crisis EE.UU. tome las medidas políticas y diplomáticas contempladas por la resolución aprobada recientemente por el Consejo de Seguridad, afirmó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia.
Tras el nuevo disparo, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, instó a la comunidad internacional a adoptar nuevas medidas punitivas contra la nación asiática. En la misma línea se pronunció el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, quien adelantó que las "sanciones y presión internacional se tensarán aún más para forzar a Corea del Norte a no tener otra opción más que encaminarse hacia un diálogo sincero".
Los mandatarios de Rusia, Vladímir Putin, y de Francia, Emmanuel Macron, también condenaron las "acciones provocativas" de Pionyang, que violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU y amenazan la paz y la estabilidad de la península coreana. Sin embargo, hicieron hincapié en la necesidad de hacer frente a "esta crítica situación" por medios político-diplomáticos y la reanudación de las negociaciones directas entre las partes.
Esta semana, ese organismo rector internacional adoptó por unanimidad una nueva ronda de sanciones contra Corea del Norte, en respuesta a su sexta y más potente prueba nuclear realizada el 3 de septiembre. Esa medida, que fue redactada por EE.UU., es contemplada como el régimen de sanciones más estrictas de la ONU en el siglo XXI.