Nikki Haley, representante permanente de EE.UU. ante la ONU, ha afirmado que el máximo ente decisivo de ese órgano ha agotado todas las opciones a su disposición para contener a Corea del Norte y su programa nuclear. Según la diplomática, ahora se tendría que considerar una acción militar.
"Si Corea del Norte continúa con esta conducta temeraria, si EE.UU. tiene que defenderse o defender a sus aliados de alguna manera, Corea del Norte será destruida. Y todos sabemos eso", indicó Haley durante una entrevista televisada de CNN, aclarando que "ninguno de nosotros quiere la guerra".
"Queríamos ser responsables y pasar por todos los medios diplomáticos", aseveró la embajadora, añadiendo que ha sido agotado "prácticamente todo lo que podemos hacer en el Consejo de Seguridad".
"Si nada de esto funciona, el general Mattis [James Mattis, secretario de Defensa] se hará cargo del asunto", indicó Haley citada por 'The Hill'.
Por su parte, el Pentágono no se ha referido a las posibles acciones que puede tomar contra Pionyang, pero el presidente de EE.UU., Donald Trump, aseguró que su país cuenta con opciones "efectivas y abrumadoras" para defender a su pueblo de cualquier amenaza de Pionyang, y que no dudará en utilizarlas si es el caso.
Nuevos lanzamientos pese a las sanciones
Las declaraciones de Haley surgen luego de que Pionyang llevara a cabo su sexta prueba nuclear, seguida días después por el lanzamiento de un misil por sobre Japón. Tras estos ensayos, el líder Kim Jong-un despreció la imposición de sanciones en contra de Corea del Norte y anunció que su país está cerca de completar sus fuerzas nucleares.
Dichas medidas restrictivas fueron aprobadas el pasado 11 de septiembre por el Consejo de Seguridad, e implican la prohibición del suministro de condensados de gas al país asiático, así como restricciones a la importación de productos refinados. Trump acordó, junto con su homólogo surcoreano, Moon Jae-in, aplicar más rigurosamente dichas sanciones, a pesar de que había expresado dudas acerca de su efectividad.