La coalición liderada por EE.UU. mató al menos a 84 civiles, entre ellos 30 niños, cuando realizó dos ataques aéreos cerca de la ciudad siria de Raqa en marzo. Sobre esto informó la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW), precisando que la coalición no tomó las medidas necesarias para evitar pérdidas civiles.
"La coalición encabezada por EE.UU. atacó una escuela y un mercado, matando al menos a 84 civiles", indicó la ONG, que condena que el alto número de muertes civiles "plantea preocupaciones" de que la coalición "no tomó las precauciones necesarias para evitar y minimizar las víctimas civiles", que constituye una "exigencia del derecho internacional humanitario".
HRW reconoce que también había combatientes del Estado Islámico en esos lugares. Sin embargo, las investigaciones de la ONG en el lugar de los ataques—un colegio y un mercado— apuntan a que la coalición debería asumir la responsabilidad por ellos.
"La coalición debería llevar a cabo investigaciones exhaustivas, inmediatas e imparciales de los ataques, hacer todo lo posible para prevenir ataques similares, y proporcionar compensación o condolencias a las personas que sufrieron pérdidas debido a las operaciones de la coalición", agregó HRW.