Aviones y helicópteros militares de Rusia y de Serbia han comenzado este miércoles su segundo programa anual de entrenamiento conjunto en la región rusa de Lípetsk.
Se trata de los ejercicios militares BARS-2017 (acrónimo ruso de Hermandad de Aviadores de Rusia y Serbia), en los que participan diversas unidades de las fuerzas aéreas de ambos países eslavos.
El programa de entrenamiento prevé la participación de hasta 20 aeronaves militares, entre ellos cazas de superioridad aérea MiG-29UB, así como el mítico helicóptero Mil Mi-8, uno de los más fabricados en el mundo.
Los ensayos tácticos simularán la destrucción de objetivos enemigos pertenecientes a grupos armados ilegales, así como tareas de búsqueda y de rescate en situación de combate.
Se trata de un "entrenamiento práctico" que incluye "operaciones de combate" preparadas y ejecutadas por "equipos mixtos" de militares rusos y serbios, expresó el piloto de las fuerzas aeroespaciales de Rusia, Konstantin Súrikov.