Al menos 1.500 viviendas, negocios y estructuras destruidas y al menos 10 víctimas mortales son el saldo que han dejado los incendios que azotan a ocho condados del norte de California (EE.UU.), reportaron las autoridades.
Ante la gran devastación, considerada la peor en la historia de California, el gobernador Jerry Brown declaró el estado de emergencia, informó el diario 'Los Angeles Times'.
Janet Upton, subdirectora estatal del Departamento Forestal y de Protección contra Incendios, declaró que por lo menos 15 incendios destruyeron un estimado de 1.500 estructuras residenciales y arrasaron casi 3.000 hectáreas.
Una persona murió y dos resultaron heridas en el condado de Mendocino, indicó el diario 'The New York Times' al citar a la funcionaria.
Aunque se establecieron muchos centros de evacuación, algunos ya están al máximo de su capacidad debido al gran número de personas en fuga. Se estima que 20.000 personas fueron evacuadas.
Los bomberos luchan por sofocar las llamas en ocho condados -Napa, Sonoma, Lago, Mendocino, Yuba, Nevada, Calaveras y Butte-, indicaron las autoridades.
Los incendios comenzaron alrededor de las 10 de la noche del domingo y fueron avivados por ráfagas de viento que se movían a más de 80 kilómetros por hora, afirmó Upton.
Los peores incendios en el norte de California tienden a presentarse en octubre, debido a que las condiciones de sequía los propagan lejos y de forma rápida. A este tipo de vientos se les conoce como 'vientos del norte' o 'vientos diablo'.
California ya fue azotada por fuertes incendios el verano pasado. A finales de septiembre, varios siniestros obligaron a que 1.000 personas fueran evacuadas en el sur del estado.