Una jueza de la Audiencia Nacional de España, Carmen Lamela, ha dictaminado el ingreso en prisión sin fianza de los presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural —Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, respectivamente—, dos organizaciones soberanistas catalanas.
Sánchez y Cuixart están acusados de sedición por su presunta implicación en los disturbios que tuvieron lugar el pasado 20 de septiembre, cuando sus organizaciones habrían incitado a los ciudadanos a concentrarse frente a la sede de la Consejería de Economía de Cataluña mientras las autoridades españolas registraban el lugar.
Esa magistrada ha acusado a ambos líderes de "promover" concentraciones masivas durante la acción de la Guardia Civil con el fin de proteger a los gobernantes catalanes, en lugar de realizar un llamamiento a celebrar una manifestación pacífica.
Por su parte, el jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, y la intendente de ese cuerpo de seguridad autonómico, Teresa Laplana, quedan en libertad provisional sin fianza, pero sometidos a medidas cautelares. A ambos les han impuesto comparecencias quincenales, les han retirado el pasaporte y les han prohibido salir de España.
- En España, un delito de sedición es penado con entre 8 y 10 años de cárcel para "los que hubieren inducido, sostenido o dirigido la sedición o aparecieren en ella como sus principales autores".
- Para las "personas constituidas en autoridad", el artículo 545 del Código Penal prevé una pena de entre 10 y 15 años.
- A los ciudadanos que cometan este tipo de delitos y cuyos casos no se refieren a los ya mencionados, se suele aplicar una pena de 4 a 8 años.