La tensión política en Cataluña ha tenido un gran impacto en los bancos de la region, que perdieron miles de millones de euros en depósitos en menos de dos semanas, informa 'El Confidencial'. Según varias fuentes citadas por el medio, las entidades financieras catalanas CaixaBank y Banco Sabadell perdieron unos 9.000 millones de euros en los diez días posteriores al referéndum independentista que se celebró el pasado 1 de octubre.
De esta suma, unos 6.000 millones de las pérdidas corresponden a CaixaBank y unos 3.000 millones al Banco Sabadell. La fuga de clientes se produjo tanto como consecuencia del mismo 1-O, como de los choques con la Policía durante el referéndum y las posteriores declaraciones del Gobierno catalán, junto con la huelga general respaldada por el partido independetista de extrema izquierda Candidatura de Unidad Popular (CUP) del 3 de octubre y el discurso televisado del rey Felipe VI ese mismo día.
La fuga más masiva se registró precisamente el pasado 4 de octubre, tras las manifestaciones y el discurso del monarca. Aunque no se ha emitido una cifra oficial, según la ministra de Sanidad y Servicios Sociales española, Dolors Montserrat, en un solo día los bancos habrían perdido 4.000 millones de euros. "Al final, las empresas se van porque sus socios, sus accionistas, ven cómo en un día perdieron 4.000 millones de euros en cuentas bancarias en Cataluña", comentó Montserrat en una entrevista.
Ante estas circunstancias, CaixaBank y Sabadell decidieron apresuradamente trasladar su sede social fuera del territorio de Cataluña, un movimiento que se produjo menos de una semana después de la celebración de la consulta. Tras esta decisión, la tendencia ha cambiado, según las mismas fuentes financieras de 'El Confidencial'. "La actividad se ha normalizado totalmente y hasta comienza a haber más entrada que salida de dinero", afirmaron al medio, aunque sin precisar más detalles acerca de los importes de captación de nuevos capitales.