Cientos de miles de personas podrían morir solo en los primeros días de una guerra en la península coreana, incluso sin la utilización de armas nucleares, advierte un informe del Servicio de Investigaciones del Congreso de EE.UU., citado por la agencia Bloomberg.
Debido a la densidad de población en las dos Coreas, un conflicto armado "afectaría a más de 25 millones de personas a ambos lados de frontera, incluidos unos 100.000 ciudadanos estadounidenses", continúa el reporte.
Las tensiones entre EE.UU. y Corea del Norte se han intensificado en los últimos meses con la interminable guerra de amenazas mutuas, y el incremento del despliegue militar en la región está empeorando aún más la situación.
Incluso si Pionyang "emplea únicamente armamento convencional, el número de muertos en los primeros días del conflicto oscilará entre 30.000 y 300.000", señala el documento. Para llegar a esas estimaciones, los autores del informe se basaron en la alta concentración de artillería norcoreana desplegada en la frontera con Corea del Sur, que "en conjunto tiene capacidad para disparar hasta 10.000 proyectiles por minuto".
Pero el Servicio de Investigaciones también pronostica una rápida escalada del conflicto, que se propagaría más allá de la península coreana, involucrando a otros países vecinos como China, Japón y Rusia.
"Una guerra prolongada –particularmente si Corea del Norte llega a utilizar armas nucleares, biológicas o químicas– causaría enormes pérdidas de vidas humanas y además afectaría a territorio japonés y estadounidense. Tal conflicto también implicaría una masiva movilización de las fuerzas estadounidenses hacia la península coreana, con un gran número de bajas en las filas norteamericanas", señala el informe.
"Para complicar las cosas, si China se involucra en la guerra, esas bajas (de EE.UU.) podrían crecer aún más", advierte.