La gonorrea requiere de nuevos fármacos para frenar su expansión

Mientras la bacteria se vuelve cada vez más inmune a los medicamentos, un equipo de investigadores afirma tener una estrategia para combatirla.

La gonorrea o blenorragia se está convirtiendo en una 'superbacteria', lo que significa que los medicamentos que se usan habitualmente para tratarla ya no son eficaces. Los gonococos, que la causan, pueden producir infecciones en los genitales, el recto y la garganta.

El decreciente uso de preservativos, el el incremento de los modos de vida urbanos y los viajes, las bajas tasas de detección de la infección y la inadecuación o fracaso del tratamiento son factores que contribuyen a la expansión de esa enfermedad. 

"Es hora de actuar"

En un nuevo estudio publicado el martes en la revista PLOS Medicine, Xavier Didelot, profesor del departamento de enfermedades infecciosas y epidemiología del Imperial College de Londres, informó junto con un grupo de colegas que sus esperanzas están depositadas en un medicamento hoy tenido como antiguo, y que podría evitar que esta infección se vuelva más resistente a nuevos antibióticos.

El tema es que "nos estamos quedando sin opciones para tratar los casos de gonorrea", advierte Didelot. "De este modo, en lugar de esperar a que fallen las pocas opciones restantes, es hora de actuar y comenzar a usar otros antibióticos de manera que la enfermedad no se vuelva resistente a las medicinas".

El hecho de que en los EE. UU. la mayoría de las infecciones por blenorragia respondan al tratamiento no significa que la creciente resistencia de la infección no despierte serias preocupaciones. En 2016 hubo 470.000 nuevos casos en ciudadanos estadounidenses.

Lo que se descubrió en el estudio

El grupo de investigadores desarrolló un modelo matemático que captura la dinámica de la resistencia de la gonorrea a la cefixima, según observaciones realizadas entre 2008 y 2015. La cefixima es un antibiótico que se usaba anteriormente para tratar esta dolencia, pero los médicos dejaron de utilizarla debido a que resultaba cada vez menos eficaz. El estudio incluyó un análisis de la resistencia ejercida por las bacterias que causan la enfermedad, para explicar por qué la eficiencia de la cefixima disminuyó a partir de 2010. 

Los científicos concluyeron que esta infección puede tratarse con la cefixima todavía hoy, y que de esa manera quizá se podría combatir la resistencia que ha desarrollado la bacteria. En su estudio, predicen que ese medicamento podría reintroducirse con éxito, siempre que sólo se use para tratar una cuarta parte de los individuos infectados. De esa manera, sostienen, la cepa no incrementaría sus resistencias. 

¿Por qué no se desarrollan nuevos medicamentos?

El desarrollo de nuevos antibióticos no resulta muy atractivo para la industria farmacéutica. Los tratamientos antibacteriales son breves, al contrario de lo que ocurre en el caso de enfermedades crónicas, y van perdiendo eficacia a medida que aparecen nuevas resistencias, con lo que hay que buscar constantemente nuevos fármacos.

Si la resistencia de la gonorrea a los antibióticos sigue aumentando, los resultados podrían ser desoladores, dado que esta enfermedad de transmisión sexual puede causar complicaciones a largo plazo -como la infertilidad, entre otras- si no es detenida a tiempo.

Más resistente cada año

En julio pasado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que cerca de 78 millones de personas resultan infectadas de blenorragia cada año en todo el mundo. Más alarmante aún es que en 97% de los casos, en los 77 países encuestados, se informó de la presencia de cepas resistentes a los medicamentos.

La bacteria causante de la gonorrea (el gonococo) es especialmente lista. "Cada vez que se utiliza una nueva clase de antibióticos para tratar la infección, evoluciona y se vuelve resistente a ellos", dice Teodora Wi, funcionaria médica del departamento de Reproducción Humana en la Organización Mundial de la Salud (OMS).