El capitán de la selección peruana, Paolo Guerrero, ha sido suspendido 30 días tras conocerse el resultado analítico adverso de la prueba antidopaje que se le realizó tras el partido que enfrentó a Perú y Argentina el pasado 5 de octubre.
En declaraciones a la Radio Nacional del Perú, Julio Segura, médico de la selección peruana, ha explicado que lo que pasó con Guerrero fue "un proceso gripal respiratorio" que terminó con traqueítis, por lo que tuvo que tomar medicamentos, aunque estos no tenían que ver con el dopaje. "Felizmente, la capacidad de recuperación que tiene es muy buena", ha indicado el médico en declaraciones recogidas por Radio Programas del Perú (RPP).
Asimismo, Segura ha recalcado que la Federación Peruana de Fútbol no utiliza "sustancias que producen doping" y ha descartado que en la prueba de Guerrero haya habido negligencia. "No creo que hayan dejado los frascos abiertos", dijo Segura, agregando que el caso está siendo evaluado por el jefe de médicos de la CONMEBOL.
"Definitivamente, el frasco no se puede quedar abierto hasta que llene la sustancia", ha reiterado. El médico de la selección peruana ha indicado que "Paolo está muy sorprendido y enojado por todo esto" y que tienen una nutricionista encargada de "verificar la alimentación y las sustancias que pueden consumir nuestros jugadores".