El príncipe saudita Al Walid ben Talal, que ha sido detenido junto a decenas de hombres poderosos del país, entre ellos príncipes y ministros, es nieto del rey fundador de Arabia Saudita, Abdulaziz ben Saud, y un exitoso emprendedor internacional, cuya fortuna se eleva a 17.000 millones de dólares, según un 'ranking' del pasado mes de mayo de la revista 'Forbes'.
Negocio
El príncipe, la 45ª persona más rica del mundo y la más millonaria de Arabia Saudita, posee porcentajes en compañías privadas y públicas de EE.UU., Europa y Oriente Medio a través de una de las empresas de inversiones internacionales más exitosas, el Kingdom Holding Company (KHC).
La KHC, cuyo propietario y presidente es Talal, participa en gigantes estadounidenses como Citigroup, Twitter, la empresa de gestión hotelera Four Seasons Hotels & Resorts, el hotel George V en París y el hotel Savoy en Londres.
Además del KHC, el príncipe, conocido como el Warren Buffett árabe, posee la mayoría de la firma de entretenimiento en idioma árabe Rotana y otros activos. El multimillonario también invirtió en AOL, empresa de servicios de Internet y medios, Apple, Motorola, Fox Broadcasting y otras compañías de tecnología y medios. Asimismo, vendió su participación en Apple en 2005.
En diciembre de 2016, Al Walid ben Talal se unió al grupo global de inversores Breakthrough Energy Coalition, de Bill Gates, con la promesa de una inversión de 50 millones de dólares.
Hechos curiosos
- Posee varios aviones: Es propietario de un Boeing 747, un Airbus 321 y un Hawker Siddeley 125.
- En noviembre de 2007, el príncipe se convirtió en el primer comprador privado de un Airbus A380 y lo adaptó a sus gustos extravagantes.
- Demandó a Forbes en 2013 por subestimar su fortuna.
- Es filántropo. Gran parte de su actividad de caridad se destina a iniciativas educativas para cerrar la brecha entre las comunidades occidental e islámica.
- Es considerado un defensor de la emancipación femenina en el mundo saudí.
Enlaces con Trump
El magnate árabe también tiene una historia personal con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que se remonta a la década de 1990.
El multimillonario de 62 años ayudó dos veces al mandatario estadounidense en épocas de problemas económicos. En 1991 adquirió su yate Kingdom 5KR y en 1995 le compró al republicano la participación mayoritaria del hotel Plaza de Nueva York (EE.UU.).
La historia mutua entre los empresarios se acabó en los años 90. Hace dos años que Al Walid ben Talal y Trump protagonizaron un duro intercambio de comentarios a través de Twitter. "Es una desgracia, no solo para el partido republicano, sino también para Estados Unidos. Abandone la campaña, ya que nunca ganará", escribió el multimillonario árabe.
Por su parte, el entonces precandidato a la presidencia de EE.UU. no se mordió la lengua y respondió que el príncipe saudita "quiere controlar a nuestros políticos estadounidenses con el dinero de su papi. No podrá hacerlo cuando yo sea elegido".
Cuando finalmente Trump ganó los comicios presidenciales, Al Walid lo felicitó por Twitter.