El presidente de Rusia, Vladímir Putin, estima que algunas tendencias del mercado internacional de armamento son alarmantes, debido a que "en vez de una lucha efectiva contra los grupos terroristas hay una simulación de esa lucha, mientras que crecen los suministros de armas incontrolados", según ha declarado a la comisión del Gobierno ruso para la colaboración técnicomilitar con otros países e informa Interfax.
"Las armas llegan hoy a los denominados opositores moderados y mañana caen en manos de radicales y terroristas", una situación que al mandatario ruso le incita a pensar que las zonas de tensión políticomilitar se han convertido en "un provechoso mercado para muchos" y "un eslabón de los enredados esquemas grises".
Putin ha detallado que Rusia sigue rígidamente las prioridades de su actividad en el mercado mundial de armamento y siempre prioriza "los intereses de la seguridad y la estabilidad global y regional" frente a los ingresos por esta clase de ventas.
Además, el inquilino del Kremlin ha recordado que "Rusia está firmemente comprometida en la lucha contra el terrorismo" y elige con cuidado quién recibe su armamento y cómo lo utiliza, algo que es "una gran responsabilidad para cualquier Estado".
A pesar de que resulta "muy importante" que "todos los participantes del mercado" entiendan este aspecto, Vladímir Putin considera que algunos "abandonan las normas y los principios del derecho internacional" e, incluso, amenazan directamente a países soberanos.