El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Actualidad

El país suramericano que tendrá mayor crecimiento este año no cree que haya sido por un "milagro"

Publicado:
Tras 11 años de la llegada de Evo Morales a la presidencia boliviana, una serie de acciones certeras y consecuentes han hecho que este país tenga el PIB de mayor crecimiento en la región.
El país suramericano que tendrá mayor crecimiento este año no cree que haya sido por un "milagro"

Las proyecciones que indican que Bolivia será el país suramericano con mayor crecimiento en 2017 han llevado algunos medios a hablar de un "milagro económico". Sin embargo, una mirada a sus políticas públicas demuestra que la nacionalización de los hidrocarburos y el pueblo boliviano tienen mucho que ver en el supuesto "prodigio".

Antes de la llegada de Evo Morales a la presidencia, en 2006, el país estaba sumido en la inestabilidad política. Una gran conflictividad social y la acción preponderante de las transnacionales delineaban la escena económica interna.

Este año, el Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia tendrá un crecimiento aproximado de 4,2 %, el más alto en toda la región suramericana, según las estimaciones del Banco Mundial (BM), de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Este incremento no es sorpresivo ni exclusivo de 2017, pues si se observa un gráfico del comportamiento del PIB durante la década que ha gobernado Morales, se notará que, a pesar de  variaciones, la cifra porcentual se ha mantenido y mostrado incluso un alza sostenida.

Durante los últimos 12 años el promedio de crecimiento fue de 4,9 %. "Bajó a menos de 4 % solamente en el 2009, por la conspiración política y económica que enfrentó el gobierno ese año", analiza Gonzalo Gosalvez, docente de economía política en la Universidad Mayor de San Andrés, en Bolivia, consultado por RT.

Este año tampoco ha sido sencillo. El porcentaje alcanzado, explica Gosalvez, ocurre en el contexto de la crisis económica mundial, que estalló entre 2007 y 2008 y aún genera consecuencias.

Los países que tienen una economía basada en la exportación de materias primas, como Bolivia, fueron particularmente afectados, pues sus precios se redujeron, expone este economista con maestría en Evaluación Ambiental.

Al analizar las cifras, puede verse que, si bien el crecimiento ha disminuido con relación a 2014, "se mantiene en un nivel muy importante, sobrellevando tasas negativas de dos sectores importantes para la economía boliviana: los hidrocarburos y la minería", precisa.

La fortaleza económica

En medio de los embates de la crisis mundial y de presiones externas contra el gobierno de Morales, la economía boliviana ha sabido mantenerse en pie.

La "mirada hacia el mercado interno" y la "democratización del consumo" han permitido que el país suramericano afronte de una mejor manera el contexto económico internacional, en opinión de Sergio Martín-Carrillo, investigador y miembro del Consejo Ejecutivo del Centro Estratégico de Geopolítica, entrevistado por RT.

"No depender de la inversión privada" ha sido clave, en momentos en los que los "privados no estaban dispuestos a invertir en Bolivia".

El economista Gonsalvez agrega que las adversidades han sido compensadas por sectores como la agricultura, la construcción, la industria, el transporte, las comunicaciones, el comercio, las finanzas, la energía eléctrica, el gas y el agua.

¿Milagro?

Frente al supuesto "milagro" en la economía boliviana, ambos expertos rechazan tal explicación. Gonsalvez se refiere a la nacionalización de los hidrocarburos, decretada por Morales el 1° de mayo de 2006, como "una conquista obtenida mediante la movilización popular contra gobiernos neoliberales".

Desde 1995, los recursos del país andino habían estado en manos de 21 consorcios multinacionales que se llevaban la mayor parte de la ganancias, recoge 'Telesur'.

La nacionalización hizo que los ingresos del Estado aumentaran hasta multiplicar varias veces los de las transnacionales, añade Gonsalvez.

Por su parte, Martín-Carrillo manifiesta que "evidentemente no es un milagro", sino el resultado de la aplicación de "políticas económicas a favor de las grandes mayorías".

El Estado boliviano se posesionó de la mayor parte de las regalías por la explotación de estos recursos, que posteriormente, mediante la política redistributiva, han sido canalizados a todos los ciudadanos bolivianos, sostiene.

"El Estado pasó a ser un actor fundamental dentro del proceso de desarrollo económico", concluye.

La importancia del ahorro

Durante los años de contexto favorable, explica Martín-Carrillo, se llevó a cabo una política de ahorro que permitió contar con un colchón de recursos para afrontar la crisis mundial actual.

"Bolivia optó por una economía eficazmente precavida", recoge un escrito del economista español Alfredo Serrano, publicado en 'Telesur' en noviembre de 2016.

Desde su punto de vista, el país no se dejó "arrastrar por los vaivenes" de las materias primas y "supo construir su cinturón de seguridad sin necesidad de sacrificar derechos sociales".

Expone Serrano que no sólo se incrementó el ahorro público sino también el privado. "En total, contemplando todas las fuentes, Bolivia posee un ahorro de 48.000 millones de dólares", en cifras de 2016.

Los indicadores del Ministerio de Economía y Finanzas de ese país arrojan que hasta noviembre del año pasado el número de cuentas en el sistema financiero había subido 8 %.

El 88 % de ellas corresponde a cuentas de menos de 500 dólares, lo que significa que "quienes antes antes no tenían recursos, hoy pueden ahorrar", recoge El Deber.

Hitos de la economía

Al hacer referencia a las bases del modelo económico que ha propiciado el crecimiento, los especialistas entrevistados las han situado en los siguientes puntos:

  • Recuperación de los hidrocarburos.
  • Alto nivel de inversión productiva, liderada por el Estado y acompañada por el sector privado, nacional e internacional.
  • Políticas sociales de redistribución de la riqueza.
  • Democratización del consumo.
  • Estabilidad macroeconómica reforzada con estrategias de control de precios.
  • Políticas monetarias expansivas y bolivianización de la economía.
  • Inversión pública.

Reducción de la pobreza

"El pueblo boliviano nunca fue pobre ni se sintió pobre", afirma Gonsalvez, al explicar las causas de la disminución de la pobreza en ese país.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) recoge en su portal que la pobreza pasó de 59,6 % en 2005 a 38,6 % en 2015, mientras que en el mismo lapso la pobreza extrema  disminuyó de 36,7 % a 16,8 %.

Según el analista, esto se debe a la prioridad de las políticas sociales, que hacen hincapié en transferencias directas a la población más vulnerable (mujeres, niños, adultos mayores) mediante subvenciones del gobierno en servicios básicos.

A ello se suman incrementos salariales y políticas de infraestructura en vivienda, salud y educación, entre otras.

"La reducción de esos índices es sólo una consecuencia de un proyecto político histórico", manifiesta Gonsalvez.

¿El neoliberalismo fracasó en Bolivia?

En las fórmulas neoliberales, generalmente se deja atrás la inversión social, en beneficio de las cifras macroeconómicas. En contrapartida, la realidad boliviana pareciera ir por la otra acera.

Ambos expertos coinciden en que la formula neoliberal no sólo ha fracasado en el país andino, sino en el resto del mundo.

El modelo económico boliviano ha demostrado durante los últimos años que pueden alcanzarse unos "fantásticos resultados sociales y al mismo tiempo obtener los mejores resultados macroeconómicos en la región", afirma Martín-Carrillo.

La reducción de la desigualdad, explica el economista del Celag, es otra de los grandes logros del gobierno de Evo Morales. "Tomando el indicador del Índice de Gini, éste pasó de 0,60 % en 2005 a 0,47 % en 2015".

El pueblo y la economía

También el presidente Morales ha refutado la idea del "milagro económico" y destacado en cambio la importancia de la "unidad del pueblo" para alcanzar los objetivos.

Gonsalvez considera esta afirmación como fundamental para la "estabilidad económica".

"Esta certeza política del pueblo se expresa también en un modelo que va a contracorriente del modelo neoliberal", explica.

El economista considera que debe valorarse y destacarse la economía que surge del campo y de las organizaciones comunitarias en la ciudades.

"Este sector, que pareciera no influir mucho en las magnitudes y porcentajes del crecimiento económico, sostiene la materialidad de la economía desde la producción y reproducción de la vida", opina.

Para Gonsalvez, a pesar de las duras condiciones de vida, los sectores productivos populares son un "importante soporte ideológico, político y, subterráneamente, económico".

Nathali Gómez

RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7