Las celebraciones por la clasificación de Marruecos para Rusia 2018 degeneraron en escenas de caos y violencia la noche del sábado en Bruselas, donde más de un millar de personas salieron a la calle para festejar la victoria por 2-0 sobre Costa de Marfil que dio al país norteafricano el pase a la fase final por primera vez en dos décadas.
De acuerdo con la Policía belga, unas 1.500 personas se reunieron para celebrar la victoria de Marruecos en la capital belga, donde viven unas 100.000 personas de origen marroquí. Aproximadamente 300 de los hinchas tuvieron un comportamiento agresivo y rompieron escaparates, volcaron autos, prendieron fuego a contenedores de basura y dañaron semáforos y señales de tráfico. La Policía antidisturbios fue enviada a la escena para detener a los violentos.
Los antidisturbios emplearon gas pimienta y cañones de agua para dispersar a la multitud. Al menos 22 agentes resultaron heridos en los enfrentamientos.
Todavía no se han realizado arrestos, pero los fiscales belgas prometieron castigar a los responsables, afirmando que la Policía tiene pruebas contra los alborotadores.