Este viernes el Archivo Nacional de Estados Unidos ha publicado 10.744 documentos vinculados con el asesinato del presidente John F. Kennedy. Entre ellos figura uno del FBI que aporta nuevos detalles desconocidos hasta la fecha.
El 22 de noviembre de 1963, el día que Lee Harvey Oswald asesinó al entonces presidente de EE.UU., entre Jack Ruby, quien posteriormente mataría a Oswald, y un futuro informante del FBI tuvo lugar una extraña conversación.
En la mañana de aquel día, cuando Kennedy aún estaba con vida, Ruby se puso en contacto con Bob Vanderslice, procedente de Dallas, y le preguntó si quería "ver los fuegos artificiales". Esta interacción no estaba oficialmente relacionada con el FBI en aquel entonces, ya que la entidad registró el contacto recién en 1977.
En el documento del FBI del 6 de abril de 1977 se precisa que el informante Vanderslice "estaba con Jack Ruby y en el momento del tiroteo estaban a la esquina del edifico Postal Annex frente al edificio del Depósito de libros escolares de Texas".
"Justo después del tiroteo, Ruby se fue y se dirigió hacia la zona del edificio de Dallas Morning News", reza el documento. Tras el asesinato, Ruby, propietario de un club nocturno, no le dijo nada a Vanderslice.
No se precisa a qué se refirió Ruby al proponer "ver los fuegos artificiales" y se desconoce si fue solo una alusión metafórica a la llegada de Kennedy a Dallas aquel día o una referencia a algo siniestro.