Un estudio publicado recientemente señala que las personas con obesidad que siguen un programa de pérdida de peso bajo en grasas podrían vivir más años, reporta la agencia UPI.
Al parecer, remarca el estudio publicado esta semana en la revista científica The BMJ, este tipo de dieta ayuda a disminuir el riesgo general de muerte prematura en un 18 % de las personas obesas.
Según Alison Avenell, investigadora de la Universidad de Aberdeen, Escocia, "la pérdida de peso mediante la reducción de calorías con dietas bajas en grasa ―regímenes que también resultaron bajos en azúcar y carbohidratos refinados― parece reducir la mortalidad prematura en personas con obesidad". La especialista sostuvo que la obesidad hace daño al organismo, aumentando el riesgo de condiciones como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas, presión arterial alta y colesterol alto.
En su investigación, Avenell y su equipo analizaron datos de 54 ensayos clínicos para ver si la dieta ayuda a amortiguar el impacto de la obesidad. Como resultado, publica el medio, los investigadores "hallaron pruebas de alta calidad" de 34 ensayos clínicos que muestran que las dietas reductoras de peso disminuyen el riesgo de muerte prematura en adultos con obesidad.