Por vez primera en la historia, la Marina rusa ha empleado los cazabombarderos Su-33 y MiG-29K desde la cubierta de un portaviones en una operación antiterrorista en Siria. Lo ha anunciado este martes el comandante de la Flota del Norte rusa, vicealmirante Nikolái Yevménov, en una reunión del mando de aquella dedicada a los resultados de la preparación combativa y académica de la Armada en 2017.
El comandante ha destacado como uno de los aspectos más importantes de la formación del personal naval la experiencia adquirida en operaciones en el Mediterráneo y en las cercanías de las costas de Siria. También ha subrayado la importancia del largo viaje que realizaron varios buques de la Flota del Norte encabezados por el portaviones Admiral Kuznetsov para desplegarse en la región del conflicto sirio, informa RIA Novosti.
El almirante ha precisado que los buques de la Flota de Norte —la más fuerte de las cuatro rusas— que formaron parte en distintos períodos del grupo de batalla ruso en el Mediterráneo fueron, además del portaviones Admiral Kuznetsov: el crucero pesado de misiles guiados de propulsión nuclear Piotr Veliki; las grandes fragatas antisubmarinas Severomorsk y Vicealmirante Kulakov; los grandes buques anfibios Georgui Pobedonósets y Alexánder Otrakovski; los buques tanque Serguéi Ósipov, Dubná y Kama, los barcos de rescate Nikolái Chiker, Altái y Pamir entre otros buques logísticos.