Más de cien puñaladas, la cabeza cercenada y el corazón extirpado. Así encontró la Policía el cadáver de un hombre asesinado por la violenta pandilla Mara Salvatrucha en la localidad de Wheaton (Maryland, EE.UU.).
Nuevos y macabros detalles de este asesinato han salido a la luz este miércoles tras las declaraciones de uno de los implicados en el caso, informa Washington Post.
El escalofriante asesinato a sangre fría ocurrió en la primera mitad de este año, pero recién se conoció en septiembre, cuando un integrante del grupo delictivo confesó el crimen a las autoridades.
Un crimen cuidadosamente planificado
Según reveló el informante, un grupo de al menos diez miembros de esta pandilla, conocida también como MS-13, acorralaron a la víctima de manera coordinada en una zona densamente poblada de árboles en un parque local, mientras se comunicaban mediante 'walkie-talkies'.
Una vez allí, los asesinos le asestaron al fallecido más de cien heridas de arma blanca, tras lo cual desmembraron su cuerpo e incluso extirparon el corazón de su pecho. Luego, los pandilleros arrojaron el cadáver en una tumba que habían excavado de manera anticipada, lo cual indica la premeditación de este crimen. Los investigadores creen que los delincuentes planificaron este homicidio durante al menos dos semanas.
El primer arrestado
El primer detenido por el caso es Miguel Ángel López-Abrego, alias 'El Tímido', un joven de 19 años de origen salvadoreño que habría ingresado de manera ilegal a EE.UU.. López-Abrego "habría sido el primero en clavar un cuchillo", de unos 38 centímetros de largo, "en el pecho del difunto", declaró en la corte el fiscal estatal adjunto Kelly McGann.
La Policía logró dar con el paradero de López-Abrego al allanar la vivienda de Milton Portillo-Rodríguez, otro integrante del MS-13 acusado por un homicidio diferente. Ambos sospechosos fueron detenidos el 4 de noviembre último en el condado de Avery (Carolina del Norte).
¿Qué se sabe sobre la víctima?
Por el momento, se desconocen tanto el móvil del crimen como la identidad de la víctima. Se sabe que el hombre asesinado era de origen hispano, de unos 1,57 metros de altura y unos 57 kilogramos de peso. Al exhumar el cuerpo de la víctima, la Policía encontró que el hombre vestía una camiseta con una inscripción de "Laurel de la Primera Iglesia Metodista Unida" y un rosario.