El bulo de la injerencia rusa en España entra en el ámbito político tal como lo ha hecho en los medios de comunicación: sin argumentos y sin pruebas. El desarrollo de la sesión de este jueves en la Comisión Mixta Congreso-Senado de Seguridad Nacional ha derivado en un bochornoso espectáculo de acusaciones infundadas, teorías vagas y sonrojantes demostraciones de ignorancia.
Esta comisión se proyectó con el objeto de llevar a cabo un estudio sobre ciberseguridad, al término del cual se redactaría un informe con recomendaciones para el Gobierno de España. Sin embargo, a raíz de la insistencia con que un sector de la prensa española ha acusado a Rusia de cometer injerencias a través de sus supuestos "ejércitos de hackers", esta actividad parlamentaria ha quedado absorbida por la misma dinámica paranoide.
En la sesión de este jueves, la experta compareciente era la investigadora Mira Milosevich Juaristi, invitada por el PSOE. Aunque reconoció que "no existen pruebas materiales ni huellas informáticas de que [la supuesta injerencia] fuera ordenada por el presidente Vladímir Putin o por miembros de su gabinete", se permitió afirmar que "Rusia está en una guerra informativa con España".
Con una base argumental igual de sólida, pero con una oratoria más informal, el portavoz del PSOE, Antonio Hernando, apoyó la tesis de la experta: "Si camina como un pato, nada como un pato y vuela como un pato, entonces es un pato", apuntó Hernando, en una frase que ayuda a comprender el nivel de análisis que alcanzó la comisión este jueves, y que refleja bien la calidad genérica de los argumentos con que pretende demostrarse en España la existencia de una 'trama rusa'.
Buena muestra de esta calidad fue la intervención de la portavoz del Partido Popular (PP), Ana Belén Vázquez, que explicó el funcionamiento de la injerencia rusa en España a su particular manera:
"Estamos hablando de una web-brigada de 'trolls', de 'hackers', de 'boks', de 'sofpapes', es decir, de gente de un ejército virtual para desestabilizar países", afirmó Vázquez, en uno de los momentos de la sesión que provocaron que el diario Público calificara la comisión de "esperpento".
Quizá alarmado ante la rotundidad de los argumentos expuestos por los portavoces del PSOE y del PP, Luis Miguel Salvador, de Ciudadanos, lanzó a la comisión la propuesta de su partido: "Tenemos que tomar medidas y que los malos no puedan generar problemas a la gente normal".
Caballos de Troya y dinero del Kremlin
En el informe de la experta Mira Milosevich -que ha servido de base para su comparecencia ante la comisión- se afirma que "Podemos podría estar financiado por el Kremlin". Esta experta del Instituto Elcano –institución que apoyó la teoría de la existencia de armas de destrucción masiva en Irak en 2003– reconoce en cualquier caso que "será difícil obtener pruebas de ello".
Milosevich no es la única que acusa a la formación de Pablo Iglesias de tener vínculos operativos con el Kremlin. Otro estudio, esta vez elaborado por el think tank norteamericano 'Atlantic Council' bajo el explícito título 'Los Caballos de Troya del Kremlin' afirma, en su capítulo dedicado a España, que Podemos "contempla el modelo ruso como la encarnación de la narrativa anti-occidental que pone de relieve la hipocresía y los abusos del orden liberal" y señala a este partido y a Vox –una formación de extrema derecha– como formaciones prorrusas.
El diario El País se hacía eco este lunes de las conclusiones de este estudio, utilizando un titular que era una mera adaptación del título del informe del Atlantic Council: "Podemos, el caballo de Troya para las posiciones del Kremlin".
El Atlantic Council, fundado en 1961, se anuncia como "círculo influyente de reflexión atlantista vinculado a la OTAN" y promueve el liderazgo de los EE.UU. en el escenario internacional. Los autores del capítulo español del informe son Borja Lasheras y Nicolás de Pedro. El nombre de este último trascendió el año pasado en un documento en el que figuraba como autor de una lista de supuestos "periodistas prorrusos", hecha por encargo de una de las fundaciones del magnate George Soros.