El candidato opositor en Honduras, Salvador Nasralla, pidió una reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para demostrar que hubo fraude en las elecciones realizadas en ese país este 26 de noviembre.
En una rueda de prensa transmitida por redes sociales, el aspirante a la presidencia desconoció el pronunciamiento del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que dio como ganador a José Orlando Hernández, del Partido Nacional, por una diferencia de 1,6% de los votos.
Nasralla aseguró que haría "hoy mismo" la solicitud por escrito de la reunión del Consejo para que lo reciban a él "como presidente electo". El derrocado ex mandatario hondureño, Manuel Zelaya, también avaló la teoría del fraude presentando como prueba la presunta alteración de actas, detalla La Prensa de Honduras.
"El robo ocurrió cuando estas 5.174 urnas llegaron a Tegucigalpa. Retiraron el acta original y colocaron una nueva que habían hecho en las imprentas" para revertir el cómputo final a favor del candidato oficialista, denunció Nasralla.
Informe de la OEA
Esta tarde, la OEA presentó su informe sobre los comicios en el país centroamericano. El jefe de la misión de observadores, José Quiroga, ofreció una rueda de prensa en la que denunció algunas "irregularidades" en el proceso electoral como la divulgación de encuestas a boca de urna, pese a estar prohibidas; la alteración del orden en la llegada de las urnas; la sustracción de actas y falta de sellos de seguridad.
El organismo instó al TSE a hacer ajustes en el sistema para evitar fallas como la que hubo el mismo día de las elecciones, puesto que sólo logró transmitirse el 60% de la data. La falta de transparencia y confiabilidad del Poder Electoral también son parte de las "inquietudes" del ente hemisférico.
Entre las recomendaciones hechas por la OEA para despejar las fuertes dudas sobre el proceso están: el cotejo de actas escrutadas sin presencia de los partidos; la verificación de las 5.174 urnas que no fueron recibidas por el TSE el día de la elección; la revisión de centros de votación donde supuestamente sufragó el 100% del padrón; el inicio de un período de impugnaciones; y el chequeo al sistema para determinar por qué ocurrió un fallo el mismo día del comicio.
Por último, el organismo lamentó los hechos de violencia y propuso que ninguno de los candidatos se proclame ganador hasta tanto culmine el período de verificación de resultados.