Bashar al Assad, presidente de Siria, ha afirmado que el terrorismo en su país existe y ha subsistido debido a los recursos provistos por países occidentales, y ha aseverado que la lucha antiterrorista no terminará hasta que sea eliminado el último extremista.
Por otra parte, el mandatario sirio ha asegurado que la lucha contra el yihadismo no se limita al Estado Islámico (EI), sino que ha señalado al Frente Al Nusra como uno de los focos más problemáticos del conflicto en Siria.
"El terrorismo no se limita al EI, sino que el EI es solo una parte de este. [...] Tenemos que entender que cuando nos enfocamos solo en el EI, esto equivale a un intento de dispersar la atención del hecho de que el terrorismo subsiste con el apoyo de Occidente. [El Frente] Al Nusra está a la cabeza de este terror", aseveró el presidente sirio citado por RIA Novosti.
A principios de mes, el Estado Mayor de Rusia anunció la derrota total del EI en Siria, dando fin al operativo antiterrorista ruso que había iniciado en septiembre del 2015. No obstante, horas antes de este anuncio fue reportada una evacuación de terroristas de Raqa por órdenes de EE.UU., un ejemplo más de lo que Moscú señala como una ambigua relación de Occidente con los extremistas.
"Y mientras hayan organizaciones terroristas como el EI o [el Frente] Al Nusra, esto significa que todavía estamos en guerra. Así que la guerra terminará hasta que se aniquile al último terrorista, sin importar bajo qué nombre", acotó Assad. Por su parte, el presidente ruso Vladímir Putin afirmó durante su visita a Siria que si los terroristas volvían a levantar la cabeza, serán golpeados "con ataques que aún no han visto".