David Dauzat, un joven de Texas, Estados Unidos, fue condenado a 52 años de prisión el pasado viernes, después de admitir haber decapitado a su esposa frente a sus hijos.
De acuerdo con New York Post, Duzat, de 24 años, se declaró culpable de la muerte de Natasha Dauzat, de 21, años, quien fue encontrada sin cabeza y con docenas de heridas de arma blanca a mediados de 2016.
La versión difundida de los hechos señala que el 25 de agosto del año pasado agentes policiales fueron a visitar la casa móvil de la pareja por solicitud de un pariente de la joven, pero no detectaron ninguna actitud o movimiento sospechoso. No obstante, dos horas más tarde el mismo familiar se comunicó nuevamente con las autoridades y aseguró que Dauzart lo había llamado para decirle que había "matado a su mujer".
David fue encontrado en el remolque con marcas de sangre en su ropa y la cabeza de su esposa en el congelador. Dentro del vehículo se encontraban sus hijos, de 1 y 2 años, quienes no resultaron heridos.
Según la Fiscalía del condado de McLennan (Texas), el acusado aceptó los cargos por petición de la familia de Natasha, para que los niños no tuvieran que "revivir esos recuerdos" en un juicio. Asimismo, informó que Dauzat podría ser elegible para obtener el beneficio de libertad condicional después de completar la mitad de su sentencia.