Los astrofísicos advierten que nuestro planeta tendrá un nuevo encuentro cara a cara con un extraño asteroide que recuerda una calavera, según recoge Daily Mail.
Se trata de un cuerpo celeste conocido como 2015 TB145 y formado posiblemente a partir de los restos de un cometa extinto. El asteroide mide entre 625 y 700 metros de diámetro y tiene un período de rotación de 2,94 horas. Pablo Santos-Sanz, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (España), lo caracterizó como un asteroide "oscuro", cuyo índice de reflectancia es "apenas superior a la del carbón".
Este astro llamó la atención de los científicos y de los entusiastas de la astronomía durante su primer acercamiento a la Tierra, el cual coincidió con la fiesta de Halloween el 31 de octubre de 2015.
En aquella oportunidad, el asteroide pasó a una distancia de 'apenas' 499.000 kilómetros de nuestro planeta y a una velocidad de 125.500 kilómetros por hora.
Durante ese breve acercamiento, los científicos observaron el curioso cuerpo celeste para tratar de recabar la máxima cantidad de información posible. Con estas mediciones, que incluyeron el uso del telescopio Pan-STARRS, ubicado en Hawái (EE.UU.), los científicos modelaron el recorrido del asteroide y predijeron su regreso hacia noviembre de 2018.
En la futura ocasión, sin embargo, la trayectoria del 2015 TB145 será notablemente más alejada de nuestro planeta, con un equivalente a unas 105 distancias Tierra-Luna, comparadas con las 1,3 distancias aproximadas en el caso de 2015.