El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, realizó este jueves un viaje sorpresa a Afganistán, para reunirse con los dirigentes de esa nación y analizar la nueva estrategia militar estadounidense y la delicada situación política afgana, informa Reuters.
Pence llegó en un avión militar a la base de Bagram Airfield, la más grande de EE.UU. en la nación asiática. Desde allí voló en helicóptero a Kabul, donde se reunió con el presidente afgano, Ashraf Ghani, y con el primer ministro, Abdulá Abdulá. Los periodistas que acompañaron a Pence acordaron mantener el viaje en secreto hasta una hora antes de que el vicepresidente regresara al país norteamericano.
En la reunión con los dirigentes afganos, Pence dijo que su presencia allí es una prueba tangible de que Washington está con Kabul en la guerra contra los talibanes. Asimismo anunció que, 16 años después de iniciada la invasión estadounidense, la victoria frente a los talibanes "está más cerca que nunca".
Anteriormente, el presidente Donald Trump prometió intensificar la campaña militar contra los talibanes y adelantó que EE.UU. enviaría más tropas a Afganistán. Hasta finales de agosto había unos 11.000 soldados estadounidenses en suelo afgano y desde entonces se ha ido incrementando su número.