Un grupo de manifestantes reunidos este sábado en Belén (Cisjordania) bajo la consigna "La Tierra Santa no está en venta y no se alquila" han atacado con piedras el coche en el que se encontraba el patriarca de Jerusalén, Teófilo III.
Algunos de los presentes golpearon el vehículo con las manos y se enfrentaron al servicio de seguridad que acompañaba al clérigo.
Los coches de la caravana del patriarca griego lograron con dificultades atravesar la multitud gracias a la ayuda de las fuerzas del orden y llegar hasta la Basílica de la Natividad. No se han reportado víctimas tras el incidente.
Esta noche, se oficiará en el templo una misa con motivo de la Navidad ortodoxa.
La iglesia ortodoxa griega es uno de los mayores terratenientes privados en Tierra Santa y en los últimos años ha provocado controversia entre israelíes y palestinos al tratar de vender sus activos a inversores privados.
Los medios hebreos han informado que los acuerdos de venta incluyen propiedades en Jerusalén Este y Oeste, así como en las ciudades portuarias de Cesarea y Jaffa, apuntando a algunos inversores judíos e israelíes como posibles compradores.
Los representantes de la iglesia ortodoxa griega explican que necesitan vender las tierras para pagar la deuda acumulada a lo largo de los años. Hasta ahora, la iglesia había estado arrendando la tierra a residentes con contratos a largo plazo.
Los palestinos se oponen a la venta de tierras a grupos judíos e israelíes y lo consideran un acto de traición. Según Reuters, en la manifestación de este sábado participaron cristianos de Belén y de varias ciudades de Israel, como Nazaret.