Alertan de los riesgos tecnológicos en los nuevos submarinos nucleares de EE.UU.
La Oficina de Rendición de Cuentas del Gobierno de EE.UU. (GAO, por sus siglas en inglés) ha puesto en duda en un reciente informe la madurez tecnológica de los submarinos nucleares de la clase Columbia.
El sumergible, que debe estar operativo para 2031, contará con una serie de nuevas tecnologías destinadas a aumentar su capacidad de supervivencia. Sin embargo, según la GAO, muchas de esas características no han sido probadas.
"Cualquier retraso podría posponer el despliegue del submarino"
El informe explica que se requieren "desarrollos y pruebas adicionales" para demostrar "la madurez de varias tecnologías" que son "críticas para el rendimiento" de los submarinos, incluido el sistema de potencia integrado, el reactor nuclear, el compartimiento común de misiles, el propulsor y tecnologías relacionadas.
La Oficina señala que hasta el momento se desconoce si estas tecnologías "funcionarán como se espera, se retrasarán o costarán más de lo planificado", mientras que cualquier retraso inesperado "podría posponer el despliegue del submarino" más allá de la fecha límite.
La GAO también denuncia que la Armada "subestimó los riesgos tecnológicos del programa" en su Evaluación de preparación tecnológica de 2015 "al no identificar estas tecnologías como críticas", lo que podría haber causado que el Congreso "no tuviera una idea completa" de los riesgos y su efecto potencial "en los costos, el cronograma y los objetivos de desempeño" a la hora de hacer importantes compromisos financieros.
"El riesgo de retrasos y problemas tecnológicos es preocupante"
Dado que la clase Columbia es vital para mantener la disuasión nuclear estratégica del país, la posibilidad de que se registren retrasos y problemas tecnológicos en los nuevos submarinos es preocupante, asevera al respecto el analista de The National Interest Dave Majumdar.
El Pentágono discrepó casi por completo con el informe en los comentarios adjuntos, asegurando que el programa indicó "con precisión" todos los riesgos en la revisión de 2015 y ha adoptado "principios clave" para cumplir con "los costos, el calendario y los requisitos de rendimiento" previstos.
Según Majumdar, "el tiempo dirá" si la GAO o el Pentágono tiene razón, si bien "históricamente", la agencia ha demostrado que "acierta la mayoría de las veces".