El príncipe Enrique de Gales y la actriz estadounidense Meghan Markle no invitarán a su boda, prevista para el 19 de mayo, al expresidente estadounidense Barack Obama ni al mandatario actual, Donald Trump, para evitar un escándalo diplomático, informa Daily Mail citando a una fuente familiarizada con la situación.
"El presidente Trump no será invitado porque la boda será solo para amigos y familiares", ha dicho la fuente precisando que "no será un evento oficial de Estado". "Si invitaran a Obama, parecería un desaire a Trump, y su alteza real no querría causar un roce diplomático", ha agregado.