El ministro de Asuntos Exteriores de Turquía, Mevlut Cavusoglu, ha afirmado este sábado que las tropas estadounidenses deben abandonar la región norteña de Manjib (Siria) y poner fin a su apoyo a la milicia kurda en la zona, informan medios locales.
Asimismo, Cavusoglu sostuvo que Washington también debe detener el suministro de armas a la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG). El canciller agregó que Turquía quiere ver pasos proactivos de Estados Unidos, y no simplemente promesas.
Las recientes operaciones militares de Turquía han desgastado las relaciones entre Ankara y Washington. En ese sentido, Rusia ha expresado su preocupación por los acontecimientos acaecidos y ha instado a todas las partes a respetar las fronteras sirias.
La demanda del ministro turco para que EE.UU. retire su apoyo y provisión de armas a los combatientes kurdos se produjo después de que Erdogan advirtiera de que las fuerzas turcas planeaban ir más allá de la ciudad siria de Afrín. Por otra parte, este jueves Donald Trump expresó su preocupación por las recientes acciones de Turquía y sugirió a Recep Tayyp Erdogan que la operación Rama de Olivo es una medida desestabilizadora en la región.
"El presidente Trump transmitió su preocupación sobre la escalada de violencia en Afrín, Siria, que corre el riesgo de socavar nuestros objetivos compartidos en Siria", afirmó un portavoz de la Casa Blanca. "[Trump] instó a Turquía a actuar con cautela y evitar cualquier acción que pueda suponer un conflicto entre las fuerzas turcas y estadounidenses", añadió el vocero.
El pasado 20 de enero, Turquía comenzó por tierra y por aire la operación Rama de Olivo, contras las fuerzas kurdas en la ciudad siria de Afrín. La incursión turca en Siria se ha documentado a través de las cuentas de Instagram de los propios soldados turcos.