El Departamento del Tesoro de EE.UU. publicó una nueva lista de 114 políticos y 96 hombres de negocios rusos que pueden enfrentar sanciones. La lista forma parte del llamado 'informe del Kremlin' presentado el lunes al Congreso de EE.UU. en virtud de la Ley para Contrarrestar a los Adversarios a través de Sanciones (CAATSA, por sus siglas en inglés), firmada por Trump el pasado 2 de agosto.
El Tesoro explica que las restricciones contra los integrantes de la lista de momento no han entrado en vigor. El informe agrega que "no crea ninguna otra restricción, prohibición o limitación al trabajo con dichas personas por parte de ciudadanos de EE.UU. o de otros países".
Entre los políticos que figuran en la lista están el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, y el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev. En la lista de oligarcas incluida en el informe figuran Roman Abramóvich, Oleg Deripaska, Alisher Usmánov e incluso el fundador de Kaspersky Lab, Yevgueni Kasperski.
Este lunes era la fecha límite para que la Administración actuara sobre la Ley CAATSA. Se esperaba que la Casa Blanca emitiera informes sobre las posibles maneras de ampliar las sanciones contra Rusia. Pero la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, dijo que es difícil evaluar con precisión el impacto actual de la ley, por lo que es mejor esperar antes de introducir nuevas restricciones.
"Hoy hemos informado al Congreso de que esta ley y su implementación están impidiendo las ventas de [material de] defensa ruso", dijo Nauert. Desde que se promulgó la ley, la vocera estima que "los Gobiernos extranjeros han abandonado las compras planificadas o anunciadas de varios miles de millones de dólares en adquisiciones de defensa rusa", agregó.
"Si la ley funciona, no se impondrán sanciones a individuos específicos ni personas jurídicas, ya que la ley en realidad funciona como elemento de disuasión", explicó la portavoz del Departamento de Estado.
"Cuando tengamos sanciones que anunciar, si llegamos a tenerlas, las anunciaremos", agregó Hauert, que explicó que estas medidas estarían dirigidas principalmente contra "entidades no rusas que son responsables de transacciones importantes con el sector de defensa e inteligencia de Rusia".