Sobrevivientes nipones a los ataques atómicos de EE.UU., enfurecidos ante su nueva doctrina nuclear

EE.UU. a través de su nueva doctrina aumenta la amenaza de una guerra nuclear, sostienen los japoneses sobrevivientes a los ataques nucleares estadounidenses contra Hiroshima y Nagasaki.

"Japón aprecia mucho la última doctrina nuclear que indica claramente la determinación de EE.UU. para garantizar la eficacia de sus capacidades de contención, así como su compromiso de proporcionar a sus aliados, incluido Japón, un mayor potencial de contención en una situación de seguridad internacional que se ha deteriorado rápidamente desde la publicación de la doctrina del 2010 en particular, en relación con el desarrollo continuo del programa nuclear y de misiles de Corea del Norte", ha comentado el recién publicado documento el ministro de Exteriores japonés, Taro Kono.

Sin embargo, la postura oficial de Tokio no coincide con la de una gran parte de sus ciudadanos. Así, la nueva doctrina nuclear de EE.UU. fue rechazada enérgicamente por los sobrevivientes de los ataques nucleares estadounidenses contra las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, los llamados 'hibakusha'.

"No veremos un mundo sin armas nucleares"

Toshiyuki Mimaki, jefe de Nihon Hidankyo, confederación las organizaciones de los 'hibakusha', recordó que el año pasado la actividad de estos grupos fue reconocida oficialmente, y el tratado sobre la prohibición de armas nucleares está abierto para la firma en la ONU.

"Sin embargo, si el presidente de una gran potencia está planeando la construcción y modernización de las armas nucleares, entonces es imposible deshacerse de las armas nucleares, mientras que nosotros, los 'hibakusha' vivimos", declaró Mimaki, citado por el canal de televisión NHK"Siento una fuerte ira", concluyó.

El jefe de otro grupo de 'hibakusha' de la prefectura de Nagasaki, Koichi Kawano, expresó que "la estrategia de EE.UU. para desarrollar ojivas nucleares compactas que sean fáciles de usar, reduce los obstáculos a su uso y aumenta la amenaza de una guerra nuclear". "Japón, un país donde se encuentran las bases militares de EE.UU., no podrá permanecer al margen", lamentó Kawano.

AFP
La nube de hongo de la bomba atómica lanzada por el bombardero estadounidense Enola Gay sobre Hiroshima el 6 de agosto de 1945. / AFP
La ciudad de Hiroshima, devastada pocos días después del lanzamiento de la bomba. / AFP
Un niño llora entre las ruinas de Hiroshima el 5 de agosto de 1946, un año después de que la bomba atómica arrasara la ciudad. / AFP
Trabajadores japoneses llevan una víctima del bombardeo atómico de Hiroshima. / Reuters
Seis años después del lanzamiento de la bomba, este hombre muestra las secuelas de la explosión atómica en Hiroshima. / AFP
Dos hermanos que sobrevivieron al bombardeo atómico de Hiroshima, en una foto sacada cuatro días después del ataque. / AFP
La devastada ciudad de Hiroshima tres años después del ataque atómico del Ejército de EE.UU. Unas 140.000 personas, más de la mitad de la población de la ciudad, murieron en el bombardeo. / AFP
Unos niños se protegen con máscaras de la radiación en Hiroshima casi tres años después del bombardeo de la ciudad. / AFP
Una mujer amamanta a su hijo cuatro días después del bombardeo atómico de Hiroshima. El bebé presenta evidentes quemaduras. / AFP
El piloto de la Fuerza Aérea del Ejército de EE.UU. Paul W. Tibbets saluda desde la cabina del bombardero B-29 Enola Gay el 6 de agosto de 1945 antes de despegar para lanzar la bomba sobre Hiroshima. / AFP
La explosión de la segunda bomba atómica estadounidense, lanzada sobre la ciudad de Nagasaki el 9 de agosto de 1945. / Reuters
Víctimas de la bomba atómica de Nagasaki arrojadas del tranvía en el que viajaban en el momento del ataque. / Reuters